Nueve militares que sirvieron hace unos 25 años en la base Malmstrom de las Fuerzas Aéreas de EE.UU. (USAF, por sus siglas en inglés), en el estado de Montana, fueron diagnosticados con linfoma no Hodgkin entre 1997 y 2007, mientras que uno de ellos ya falleció, reporta AP este lunes.
Según se desprende de las diapositivas de la reunión informativa en enero, estos casos pueden estar vinculados con el mantenimiento de misiles nucleares. "Hay indicios de una posible relación entre el cáncer y el servicio de tripulantes de misiles de combate en la base aérea Malmstrom", explicó el teniente coronel de las Fuerzas Espaciales de EE.UU., Daniel Sebeck.
Agregó que los militares que tratan con misiles nucleares "siempre han estado preocupados por los peligros conocidos, como la exposición a químicos, asbesto, bifenilos policlorados, plomo y otros materiales peligrosos en el entorno laboral".
Mientras tanto, la vocera de las USAF, Ann Stefanek, señaló que "los altos directivos son conscientes de las preocupaciones planteadas sobre la posible asociación del cáncer relacionado con tripulantes de misiles de combate en la base aérea Malmstrom".
"La información en esta reunión informativa ha sido compartida con el cirujano general del Departamento de las Fuerzas Aéreas, y nuestros médicos profesionales están trabajando para recopilar datos y entender más la situación", añadió Stefanek.
Según los datos del Instituto Nacional de Salud, citados por AP, la edad mediana de los pacientes con linfoma no Hodgkin es de 67 años, mientras que los militares que tienen este tipo de cáncer son mucho más jóvenes, tienen entre 30 y 40 años.