La presidenta interina de Perú, Dina Boluarte, llamó este martes a una "tregua nacional" para abrir una mesa de diálogo con una agenda social. La mandataria ofreció un mensaje a la nación desde Lima, mientras el país enfrenta una "gran marcha nacional" de protesta contra su Gobierno.
"Como Gobierno nos corresponde resolver los problemas que nunca han sido atendidos, durante décadas, del Perú profundo y de la capital", señaló Boluarte, tras convocar a una "tregua" con los sectores en conflicto.
En esa línea, la mandataria llamó a "abrir las mesas" de negociación con el propósito de fijar agendas por cada región y estudiar las demandas populares. "No me voy a cansar de llamarlos al diálogo, a la paz y a la unidad", exclamó.
Boluarte dijo ser "víctima" del odio y la venganza, y responsabilizó al expresidente Pedro Castillo por los incidentes registrados en el marco de las manifestaciones que se desarrollan en todo el país.
"Yo estoy sentada como presidenta constitucional de la república producto de un golpe de estado que lo diera el señor Castillo", dijo y consideró que al hacer un "análisis político", esa fue la mejor forma que podía encontrar el expresidente para "victimizarse", acusando un golpe contra él.
"Aquí no hay víctima, señor Castillo, aquí hay un país que se está desangrando producto de su irresponsabilidad", expresó.
En ese sentido, y a pesar de la creciente tensión que se vive en las calles, aclaró que no tiene pensado renunciar. "Me iré cuando hayamos convocado a las elecciones generales", afirmó. Y añadió retóricamente: "¿Mi renuncia resolvería la crisis y la violencia? ¿Quién asumiría la presidencia de la República?".
También aclaró que no es "su intención" mantenerse en el poder más allá de las elecciones anticipadas que el gobierno ha aceptado propiciar: "El proyecto nació del Ejecutivo, ahora llamo al Congreso para que priorice el adelanto de elecciones".
Boluarte pidió investigar las muertes
Durante la rueda de prensa, Boluarte reiteró además un pedido de disculpas por los fallecidos durante las protestas contra su Gobierno, y ofreció apoyo psicológico para las familias.
La exvicepresidenta, quien asumió el poder tras la destitución de Castillo, el pasado 7 de diciembre, pidió a la Fiscalía que acelere las investigaciones sobre las muertes ocurridas en el marco del paro. Además, defendió el accionar de la Policía Nacional de Perú (PNP) al considerar que mantuvo una conducta "inmaculada".
Del mismo modo, responsabilizó a "grupos radicales" y "gente manipulada" por generar "el caos y la violencia" en el país, por los incidentes registrados en el marco del paro.
Según Boluarte, el Gobierno ha recibido "información extraoficial" que indica que algunas de las muertes en las protestas fueron producto de impactos de balas 'Dum Dum', un tipo de proyectiles que "la policía no usa". En ese sentido, advirtió que ese tipo de armamento podría haber ingresado por la frontera de Bolivia "traídas por los Ponchos Rojos", un grupo de indígenas bolivianos que apoyan las propuestas políticas de Evo Morales. Por eso pidió a la Fiscalía "acelerar las investigaciones" para "saber la verdad".
"Las protestas pacíficas son válidas. Yo aplaudo. Pero me gustaría que en estas marchas pongan por delante una agenda social, una agenda que, reitero, no se ha atendido durante los últimos 30 años. No podremos atender todo lo que no se ha atendido. Pero sí queremos dejar el camino allanado para que el Gobierno que venga después de nosotros pueda seguir desarrollando al país", indicó.
Según la Defensoría del Pueblo, se han registrado 55 muertes —54 civiles y un policía— en el marco de la actual crisis política y social que vive el país, que continúa hasta hoy.
Esta jornada se espera una gran marcha nacional, varios días después de la manifestación que tenía como lema 'La toma de Lima'. Los manifestantes exigen la renuncia de la presidenta, el cierre del Congreso, la convocatoria a elecciones generales para el 2023 y a una asamblea constituyente.