Facundo Jones Huala, líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) de Argentina, fue detenido este lunes en una vivienda del barrio La Esperanza de la localidad de El Bolsón, en la provincia de Río Negro, en la región patagónica.
El ciudadano argentino estaba prófugo de la Justicia chilena desde el 11 de febrero de 2022, ya que había sido condenado en ese país a 9 años de prisión.
"Había rumores de personas que lo habían identificado en la zona desde hace varios meses y finalmente pudimos dar con él. Estaba en estado de ebriedad, en buena condición física, solo, escondido y en una situación de delito común", dijo la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, en declaraciones a TN.
El arresto se llevó a cabo a las 04:00 de la madrugada (hora local). Jones Huala fue trasladado a una comisaría de El Bolsón y luego a la ciudad de Bariloche.
El Gobierno de Río Negro informó, en una nota de prensa, que hubo investigaciones para dar con el paradero de Jones Huala desde hace varios meses.
"A partir de la determinación de la fuga de Jones Huala en Chile, y la posibilidad que se trasladara a la Patagonia para refugiarse, la Policía de Río Negro y el Ministerio de Seguridad de la provincia llevaron a cabo distintos operativos, que incluyeron intensos trabajos de búsqueda a través de sus unidades especiales y de la Brigada de Investigaciones para poder dar con su paradero", detalla.
Por su parte, el subsecretario del Ministerio del Interior de Chile, Manuel Monsalve, confirmó que el Gobierno de Gabriel Boric realizará los trámites para la extradición de Jones Huala.
"Corresponde iniciar los trámites para solicitar su extradición, trámites que inicia el Ministerio Público y el Gobierno va a estar atento, porque nos interesa, por supuesto, que no haya impunidad ni de este, ni en ningún caso. Por lo tanto, queremos que sea extraditado para que cumpla la condena que corresponde", afirmó Monsalve.
El proceso en su contra
Jones Huala fue extraditado de Argentina a Chile en 2018, siendo requerido por la Justicia de ese país por los delitos de portación de ilegal de armas de fuego y por su responsabilidad en un incendio ocurrido en enero de 2013 en el fundo Pisu Pisué, en Río Bueno.
Tras su extradición, fue condenado a 9 años de prisión en el país vecino por esos hechos. El Tribunal Oral en lo Penal de Valdivia le dio una pena de 6 años por el incendio de la propiedad y 3 años por la tenencia ilegal de armas.
Desde entonces estuvo preso en Temuco. Sin embargo, ante un recurso de amparo presentado por su defensa, el dirigente de la RAM fue excarcelado, bajo libertad condicional, el 21 de enero del 2022.
No obstante, días después un fallo de la Corte Suprema de Chile revocó la medida y ordenó que volviera a prisión. Desde entonces se encontraba prófugo.