El Gobierno de Brasil está preparando un grupo de trabajo de las Fuerzas Armadas, la Policía y agencias gubernamentales para combatir la minería ilegal en la reserva indígena Yanomami.
El ministro de Defensa, José Múcio, informó que el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea tendrán una acción específica en la zona, con el uso de la fuerza, si es necesario.
"Tiene que haber un esfuerzo concentrado de todas las instituciones para que podamos resolver el problema", dijo el alto funcionario este martes durante una entrevista con BandNews TV, destacando que antes de buscar a los responsables, es necesario salvar a la población.
Según el ministro, el Ejército hará un registro en todo el territorio para identificar a los criminales, la Marina patrullará los ríos y confiscará los botes y dragas de los mineros, mientras que, la Fuerza Aérea, además de enviar donaciones de alimentos, monitoreará el espacio aéreo y obligará el aterrizaje de aviones sospechosos.
En cuanto a la posibilidad de un enfrentamiento con los delincuentes, Múcio mencionó que espera no llegar a ese punto, sin embargo, señaló que si ocurre, todas las divisiones están preparadas.
"Ellos [los mineros ilegales] tienen helicópteros, aviones, armas pesadas y vamos a tener que enfrentarlos. Evidentemente estamos listos para enfrentarlos. Espero que no sea tan drástico, pero si es necesario, sí. Hay que cortar ese mal de raíz", declaró.
El alto funcionario aseguró que el decreto firmado el lunes por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, "facilitó que las Fuerzas Armadas tengan un poder más amplio" para reforzar la seguridad en la zona.
Asimismo, Joenia Wapichana, la primera diputada indígena en encabezar la Fundación Nacional para los Pueblos Indígenas (Funai), aseguró en un seminario virtual que el país atraviesa una nueva etapa, en la que la lucha contra la minería ilegal tendrá prioridad.
"La crisis humanitaria que el mundo está viendo en Roraima es consecuencia de la minería ilegal. Esto no es ninguna sorpresa. Se han realizado numerosas denuncias de violaciones de derechos en los últimos años, y la situación empeoró en el gobierno de Bolsonaro. Ahora vivimos en una nueva era. Nuestro país se está reconstruyendo", indicó Wapichana.
"Tenemos que dejar que las fuerzas policiales organicen la operación", manifestó, agregando que el grupo de trabajo involucrará a la Policía Federal, la agencia de protección ambiental Ibama, la Funai y varios ministerios, así como el Ejército.
La Tierra Indígena Yanomami, la mayor reserva nativa de Brasil, está distribuida entre el estado de Amazonas y Roraima. Allí viven unos 29.000 indígenas en aproximadamente 350 comunidades yanomami, ye'kwana y varios grupos aislados. Se calcula que hay unos 20.000 mineros ilegales en la zona, que en su búsqueda de oro contaminan los ríos e imposibilitan la pesca, que es la principal fuente de alimento de los habitantes locales. Además, las autoridades aseguran que la presencia de los invasores conlleva enfermedades, violencia y ha provocado desnutrición generalizada y muertes entre los pueblos originarios.