Bobi, un mastín del Alentejo de 30 años y 268 días, ha entrado en el Libro Guinness de los récords como el perro vivo más longevo del mundo y de toda la historia, según un comunicado publicado este miércoles en la página web del organismo.
La edad del animal, que ha pasado toda su vida con la familia Costa en la aldea rural de Conqueiros, en Leiria (Portugal), ha sido verificada por una base de datos pública de animales de compañía autorizada por el Gobierno portugués y gestionada por el Sindicato Nacional dos Médicos Veterinários.
El anterior récord de longevidad canina recayó en Bluey, un pastor ganadero australiano que vivió 29 años y 5 meses entre 1910 y 1939, y que era propiedad de una familia de Rochester, en Victoria (Australia).