El Gobierno de España ha calificado de "incomprensible" la reacción de Gibraltar tras el incidente aduanero ocurrido la madrugada del jueves en el territorio de ultramar, donde dos agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera resultaron heridos.
En un comunicado emitido este viernes, el Ministerio de Asuntos Exteriores del país ibérico condenó "la agresión sufrida por miembros del Servicio de Vigilancia Aduanera que intervenían en una operación de lucha contra el contrabando en territorio y aguas españolas cercanas al Peñón de Gibraltar, con resultado de heridas graves".
Además, desde Madrid han rechazado "tajantemente los términos de la declaración conjunta emitida por representantes del Gobierno británico en relación con el incidente, así como las pretensiones sobre una supuesta soberanía británica sobre el territorio y aguas de Gibraltar recogidas en ella".
"Esta declaración resulta especialmente incomprensible en el momento en el que España ha puesto sobre la mesa un acuerdo para crear una zona de prosperidad compartida", destacó el ministerio, al mismo tiempo que ha exigido "medidas eficaces de lucha contra el contrabando que perjudica a toda la zona".
Intervención "imprudente y peligrosa"
El incidente se produjo pasadas las cinco de la mañana del jueves, cuando una embarcación auxiliar del patrullero del Servicio de Vigilancia Aduanera de España observó movimiento en la playa de levante de Gibraltar que vinculó a posibles actividades de contrabando de tabaco en aguas cercanas a la Verja de Gibraltar.
La embarcación sufrió una avería en el motor, por lo que dos agentes desembarcaron en el lugar, donde fueron rodeados por un grupo de personas que les lanzó piedras, algunas de gran tamaño, antes de que consiguieran reflotar la nave y llegar hasta el patrullero a remo.
En respuesta, el Gobierno de Gibraltar acusó a España de cometer una "grave violación de la soberanía británica" y calificó la intervención de "imprudente y peligrosa".