Estados Unidos quiere desplegar misiles de medio alcance en Japón para garantizar el equilibrio de poder con China en la región, informa el diario nipón Sankei Shimbun. Según el reporte, Washington ya ha pedido el respectivo permiso a Tokio, que aparentemente está dispuesto a negociar un posible acuerdo en esta materia.
De acuerdo con varias fuentes de las dos naciones, EE.UU. se puso en contacto con las Fuerzas de Autodefensa de Japón para abordar este tipo de cooperación hace varios años en el marco de las conversaciones a nivel administrativo sobre las "funciones, misiones y capacidades" de los Ejércitos de ambos países.
Según el medio, la parte japonesa tiene la intención de iniciar conversaciones serias para aceptar el despliegue de misiles estadounidenses de medio alcance en el futuro. Entre las armas que podrían ser desplegadas, figuran también los misiles hipersónicos (LRHW) y misiles de crucero Tomahawk para aumentar su capacidad de contraataque a bases enemigas.
Así, se trata de una red de misiles con la que Japón y EE.UU. pretenden contrarrestar el sistema armamental antiacceso/denegación de área de China, detalla el diario.
Aunque aún no se ha decidido la ubicación del armamento, un funcionario del Gobierno nipón afirmó que es probable que se considere Kyushu, la tercera isla más grande de Japón, entre otras zonas.
EE.UU. no poseía misiles de alcance intermedio lanzados desde tierra con un alcance de 500 a 5.500 kilómetros en virtud del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF, por sus siglas en inglés) que suscribió con la URSS en 1987. Por otra parte, se creía que China poseía más de 1.250 misiles de alcance intermedio con base en tierra, lo que creaba una "brecha de misiles" entre Washington y Pekín, señala Sankei Shimbun.
Sin embargo, el INF expiró en agosto de 2019, y el Ejército estadounidense ha estado desarrollando misiles de medio alcance. Se espera que los LRHW, con un alcance de más de 2.700 kilómetros sean desplegados en 2023, mientras que el despliegue de unos 100 Tomahawks, con un alcance de más de 1.600 kilómetros, se prevé para 2026.
Las Fuerzas de Autodefensa de Japón también tienen previsto desplegar gradualmente un nuevo misil guiado tierra-barco Tipo 12, con un alcance de más de 1.000 kilómetros, y Tomahawks a partir del año fiscal 2025, basándose en los 'Tres documentos de seguridad' aprobados por el Consejo de Ministros japonés en diciembre del año pasado.
Los tres documentos afirman que pretenden establecer un "nuevo equilibrio" en cooperación con EE.UU. y otros países, mejorar el equilibrio estratégico en Asia Oriental, incluidos los misiles de medio alcance, y disuadir a China del uso de la fuerza.