Estados Unidos calificó el ingreso no intencional en su espacio aéreo de una aeronave no tripulada china (el globo derribado sobre la costa este) como una violación a su soberanía, recordó este miércoles el vicedirector del servicio de información de la Cancillería china, Wang Wenbin. "Entonces, ¿cómo explica el vuelo ilegal de sus globos por el espacio aéreo de China?", se preguntó en rueda de prensa.
El derribo del globo "ha tenido un grave impacto en los esfuerzos y progresos realizados por China y EE.UU. para estabilizar las relaciones bilaterales desde la reunión de sus líderes en Bali", señaló el vocero. Pekín se opone "firmemente a lo que ha hecho EE.UU." e insta a Washington a que no tome "más medidas que puedan socavar los intereses de China o aumentar las tensiones".
Las autoridades del país asiático no ven patrón alguno, como vio el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, en el sobrevuelo de territorios norteamericanos por este y otros cuatro objetos voladores, detectados sobre la frontera canadiense-estadounidense, sino una reacción exagerada ante episodios aislados, involuntarios y causados por fuerza mayor.
Por su parte, EE.UU. a partir de mayo pasado ha lanzado desde su territorio un gran número de globos a gran altura y estos han dado la vuelta al mundo en forma continua, sostuvo Wang. Más de diez veces han volado sobre China sin la aprobación de las autoridades, incluyendo la región autónoma de Xinjiang y el Tíbet.
Wang exigió una explicación por parte de EE.UU. tanto para su nación, como para la comunidad internacional sobre estas prácticas e indicó que el país norteamericano debería "reflexionar sobre su comportamiento", dejar de "difamar y atacar a China" y de engañar al público, mientras que Pekín se reserva el derecho de responder adicionalmente "si es necesario".
El periódico The Washington Post reveló este miércoles que militares y servicios de inteligencia estadounidenses siguieron el desplazamiento del globo chino durante casi una semana desde su lanzamiento en la isla china de Hainan hasta que entró en el espacio aéreo estadounidense.