El Gobierno argentino confirmó un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para modificar el convenio firmado en 2022 y renegociar la deuda que el país tiene contraída con el organismo. Según medios locales, uno de los cambios se refiere a la meta de acumulación de reservas para este año y pretende responder con criterios "realistas" a las pérdidas originadas por la sequía y el conflicto en Ucrania.
Tras mantener una reunión con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en el marco de la cumbre del G20 en la India, el ministro argentino de Economía, Sergio Massa, anunció en un comunicado que se había alcanzado "el consenso con el FMI" con el objetivo de "adecuar la programación del trabajo del año desde el inicio para dar previsibilidad y no tener que hacer 'wavers' (pedidos de perdón) durante el año".
Además, señaló que la intención de ambas partes es ser "realistas y previsibles" para que el programa económico "sea de verdad un ordenador y no un papel en el aire que no se cumple". En ese sentido, identificó como metas "el orden fiscal, la acumulación de reservas y la programación monetaria ordenada".
De esta manera, Argentina pretende garantizar desembolsos por 19.000 millones de dólares para engrosar las reservas y hacer frente a los vencimientos de deuda con el FMI previstos para este año.
Caída de la balanza comercial
Durante el encuentro con Georgieva, Massa explicó que, además de la sequía que afecta a Argentina, el conflicto en Ucrania tuvo un impacto negativo de unos 4.940 millones de dólares en la balanza comercial, debido al incremento de los precios internacionales de los combustibles y del costo de fletes para exportación.
Por todo ello, estima que "es mejor" afrontar esta situación "poniendo objetivos alcanzables para no estar corrigiendo cada trimestre". Sin embargo, ni el Gobierno argentino ni el FMI brindaron precisiones sobre los cambios en el programa económico, si bien trascendió que una de las modificaciones estaba vinculada con los objetivos de acumulación de reservas.
Según el convenio original, este año se debían sumar 4.800 millones de dólares para alcanzar así el objetivo bianual de 9.800 millones.