El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, declaró este viernes que Moscú no permitirá que Occidente vuelva a "volar" los gasoductos rusos.
El canciller señaló que Rusia confiará en "socios fiables" en política energética, entre ellos China e India, pero no en Occidente. "No volveremos a confiar en ningún 'socio' de Occidente, no permitiremos que vuelvan a volar gasoductos", afirmó Lavrov en la conferencia Raisina Dialogue en Nueva Delhi.
"Pedimos realizar una investigación [sobre las explosiones de los gasoductos Nord Stream], e inmediatamente esa investigación fue rechazada", denunció. Según el alto diplomático, "todo lo que está ocurriendo ahora es para convertir a Europa en un actor menor para EE.UU., eliminar la ventaja competitiva de Europa y cortar el vínculo económico entre Rusia y la UE".
Entre otras cosas, el jefe de la diplomacia rusa subrayó que Washington cree que "tiene derecho a declarar como amenaza para sus intereses nacionales cualquier lugar del mundo, como en Yugoslavia, en Libia o en Irak, en Siria, a 10.000 millas del océano Atlántico".
Además, recordó que Rusia llevaba más de 10 años advirtiendo que las acciones de Occidente "tendrían consecuencias muy negativas", señalando que los sucesos "no tienen lugar al otro lado del océano", sino cerca de sus fronteras, "en territorios donde los rusos han vivido durante siglos". "Si no es un doble rasero, entonces no soy ministro de Asuntos Exteriores", comentó.
También indicó que en Ucrania se está llevando a cabo una "guerra contra todo lo ruso". "¿Se imaginan, por ejemplo, a Irlanda prohibiendo el inglés, o a Bélgica prohibiendo el francés, o a Suiza prohibiendo el alemán, o a Finlandia prohibiendo el sueco? [...] Por supuesto que no", sostuvo, agregando que la lengua rusa "fue cancelada completamente" en Ucrania.
En este contexto, el alto diplomático criticó que en la conferencia no se han discutido nunca ni las acciones de Occidente ni "la guerra contra todo lo ruso" en Ucrania. "¿Han preguntado a EE.UU., a la OTAN, si saben lo que hacen?", expresó, añadiendo que no recuerda que "la conferencia se haya centrado en estas cuestiones".
Asimismo, Lavrov mencionó las declaraciones de funcionarios occidentales de que el conflicto en Ucrania es "una amenaza existencial". "Si Occidente lo ve como una amenaza existencial, nosotros también", concluyó.