La conversión del yuan chino en una moneda internacional es "una condición necesaria para mantener la paz en el mundo". Así lo sostiene Ju Jiandong, profesor jefe de la Escuela de Finanzas de la Universidad de Tsinghua (Pekín), en un artículo publicado el 28 de febrero en el diario estatal chino Global Times.
El autor explica que, si bien el panorama económico global está liderado por EE.UU., la Unión Europea y China, es el dólar estadounidense el que domina el sistema monetario mundial. En este contexto, recalca que el rol de yuan es menor que la fuerza económica real del gigante asiático, por lo que la divisa china tiene "un gran potencial".
"Cuanto más rápido se desarrolle la economía china en relación con la estadounidense, mayor será la brecha entre el dólar y la fortaleza económica de EE.UU., y más probable será que EE.UU. emprenda guerras, creando turbulencias para proteger el dólar y la economía estadounidense", enfatiza el experto.
En este sentido, el analista subraya que el estatus del dólar "como único activo seguro en el mundo" hará que el capital global se desplace a suelo norteamericano "tan pronto como estallen conflictos geopolíticos". "La economía estadounidense se beneficia de las turbulencias, mientras la economía china sufrió los efectos de la guerra. Por tanto, para evitar la guerra y aspirar a la paz, el yuan debe ser una moneda internacional un activo seguro que compita y coexista con el dólar estadounidense y que rompa su dominio", resalta Ju.
Camino hacia la internacionalización
Aunque el profesor reconoce que el liderazgo del dólar es "inquebrantable" en términos temporales, también recalca que el estatus del yuan en la palestra global se está reforzando "de forma continuada" y que el camino hacia la internacionalización ha sido "estable". Como prueba de ellos, alude a la decisión del pasado mes de mayo del Fondo Monetario Internacional, que elevó el peso del yuan, también conocido como renminbi, hasta el 12,28 % del 10,92 % en la сartera de los derechos especiales de giro (DEG), lo que afianza el estatus de la divisa.
En esta línea, el experto enfatiza que Pekín necesita seguir apostando por reformar y abrir más su mercado financiero para fortalecer la fuerza del yuan en su uso internacional. Por otra parte, la nación asiática haría bien en aprovechar las oportunidades asociadas a los "cambios tecnológicos repentinos" en el sistema monetario mundial.
Finalmente, Ju sostiene que la internacionalización del yuan ayudará a Washington a impulsar su economía real y a superar "el obstinado problema de la excesiva financiarización" (término usado para referirse a una tendencia en la que el sector financiero prevalece sobre la economía industrial y agrícola).