Una mujer oriunda de Colorado, EE.UU., que quedó embarazada tras mantener relaciones sexuales con un adolescente de 13 años no irá a la cárcel después de llegar a un acuerdo de culpabilidad con los fiscales, reportan medios locales. Sin embargo, quedará registrada como delincuente sexual.
Andrea Serrano, de 31 años, fue detenida en julio de 2022 en el marco de una investigación iniciada en su contra por haber tenido sexo con el menor. En un principio enfrentó dos acusaciones, una por agresión sexual contra un niño y otra por agresión sexual contra un menor de 15 años estando en una posición de confianza.
Tras el acuerdo, la oficina del fiscal de distrito retiró los cargos originales y los reemplazó por uno que no tiene pena de prisión efectiva, por lo que Serrano, quien ya tuvo al bebé, se aseguró evitar la cárcel.
Sin embargo, el juez a cargo del caso podría condenarla de 10 años a cadena perpetua en libertad condicional supervisada. La audiencia para dar a conocer la sentencia fue fijada para el 18 de mayo próximo.
Hasta ese día, Serrano permanecerá sin custodia tras haber pagado una fianza de 70.000 dólares en julio del año pasado.
Quejas de la familia de la víctima
Una vez que se confirmó el acuerdo al que llegó Serrano, la familia del niño con el que tuvo el bebé manifestó su desacuerdo con la decisión judicial. "Siento que le robaron la niñez a mi hijo. Ahora tiene que ser padre", lamentó la madre del menor, quien agregó que "es una víctima y va a tener que vivir con eso por el resto de su vida".
"Ella [Serrano] agredió sexualmente a mi hijo de 13 años. Ella lo introdujo a las drogas, necesita estar en prisión", continuó la mujer.
Por último, denunció un "doble estándar": "Si ella fuese un hombre y mi hijo una niña, ella estaría ahora detrás de las rejas". "Están teniendo compasión por ella", concluyó.