Un tercio de las brasileñas con más de 16 años fue víctima de algún tipo de violencia –psicológica, física o sexual– en 2022, según datos recopilados por la Red de Observatorios de Seguridad y publicados en vísperas del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo.
El año pasado, en Brasil hubo un feminicidio por día y cada cuatro horas una mujer fue violentada. De 495 feminicidios en 2022, el estado líder fue Sao Paulo con 109 asesinatos de mujeres.
Estos datos también evidencian un incremento de armas de fuego y de agresiones físicas en más de un 5 % de los casos.
"Bolsonaro amplió la tenencia y la importación de armas de fuego en Brasil, que es el principal instrumento que se utiliza en los feminicidios", explicó a RT Luiza Gomes, que integra el movimiento feminista internacional Marcha Mundial de las Mujeres (MMM).
Y continuó: "Tenemos todo ese escenario de normalización del discurso de violencia hacia las mujeres, un desmantelamiento de políticas públicas, que representa una agenda antiderechos, que encabezaba Bolsonaro, y también la cuestión de las armas y de la militarización en Brasil".
"Una reconstrucción de Brasil"
El perfil de las víctimas es casi siempre el mismo: mujeres negras entre 25 y 45 años que, en la mayoría de las veces, son agredidas por sus exparejas o parejas actuales dentro de sus propios hogares.
Latinoamérica es la única zona con una agenda común de género en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y, sin embargo, muestra los mayores niveles de desigualdad y violencia de género.
Al margen de la lucha contra la violencia, las brasileñas se organizan en movimientos para reivindicar sus derechos sexuales, reproductivos y laborales.
"Tenemos también esta agenda en este 8 de marzo: la lucha por la democracia, la lucha contra la pobreza, la lucha por una política transversal en defensa de las mujeres, la autonomía de nuestros cuerpos, como la reivindicación al aborto legal", destacó Gomes.
Durante los cuatro años del gobierno anterior, hubo un recorte del 94 % del presupuesto de políticas públicas dirigidas al sector femenino. Ahora, Lula prepara una agenda, que será anunciada el próximo miércoles, con 25 acciones para atender a las mujeres, representantes de la mayoría del electorado que lo llevó a la presidencia.
"Está ocurriendo una reconstrucción de Brasil y tenemos la confianza de que hay mujeres en el gobierno de Lula que llevan la rienda del feminismo", añadió la activista.
Pero para el movimiento feminista, la situación solo cambiará cuando las mujeres –que también son la mayoría de la población– ocupen más espacios en política. Hoy, en América Latina, menos del 30 % de los puestos de mando del Estado son ocupados por mujeres.