El Gobierno de Argentina acordó con los bancos un canje de deuda en pesos que le permitirá postergar obligaciones de pago, con vencimientos entre abril y junio de 2023, hacia 2024 y 2025.
El Ministerio de Economía que encabeza Sergio Massa formalizó la propuesta de canje de gran parte de su deuda en moneda local con dos canastas de títulos ligados a la inflación o al valor del dólar, que podrán ser amortizados en los próximos dos años.
La oferta comenzará el jueves 9 de marzo y la operación se extenderá hasta el lunes 13 del mismo mes. En total, el canje cubrirá títulos por el equivalente a unos 7.500 billones de pesos (unos 37.600 millones de dólares) que se reparten a partes iguales entre organismos públicos y entidades privadas, principalmente bancos, y otros inversores institucionales como fondos de inversión y aseguradoras.
"Junto al equipo económico nos reunimos con los representantes de los bancos y llegamos a un acuerdo para despejar los próximos vencimientos de la deuda en pesos, que nos garantizará tener un programa que le dé estabilidad al sistema financiero y tranquilidad a los ahorristas", dijo Massa desde su cuenta de Twitter.
De esta manera, la Casa Rosada aliviana las arcas públicas en un año electoral que ya impone serias dificultades económicas: desde hace una década, Argentina arrastra una alta inflación que se acrecentó en los últimos dos años, debe afrontar una deuda récord con el Fondo Monetario Internacional (de 44.000 millones de dólares), y mantiene un déficit fiscal equivalente al 2,4 % del Producto Interno Bruto (PIB), con números rojos por 1.955.141 millones de pesos (9.792 millones de dólares) en 2022.
Al anunciar el acuerdo, el titular de la cartera económica se refirió también a la "pesada herencia" que ha dejado el anterior Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) respecto a la deuda pública en pesos y la cesación de pagos decretada por el exmandatario de derecha mediante el llamado "reperfilamiento".
"Un programa de deuda certero y sostenible"
Al culminar su mandato, en diciembre de 2019, el líder de Juntos por el Cambio dejó compromisos de pago por un total de 200.000 millones de dólares a pagar entre 2020 y 2023, de acuerdo a un informe de la Universidad de Avellaneda (Undav).
"En el año 2019 conocimos el reperfilamiento de una deuda en pesos y el impacto que esto significó para todos y todas, lo que generó una gran frustración y un gran dolor para la Argentina, que todavía hoy estamos padeciendo", advirtió Massa.
Y añadió: "Este acuerdo desactiva la idea de la bomba que algunos quieren plantar, despeja la incertidumbre en los vencimientos del 2023 y sirve de base para que otros acuerdos mejoren el nivel de acceso al crédito para los ciudadanos, lo que significa mayor inversión en la economía".
Con la medida, la Casa Rosada busca evitar incertidumbre en los mercados ante la posibilidad de no poder afrontar los pagos, lo que podría generar una disparada del dólar y empeorar el nivel de inflación.
Por su parte, el presidente Alberto Fernández, afirmó desde su cuenta de Twitter que la convocatoria al canje voluntario llevará "tranquilidad" a los mercados financieros, ya que permitirá conformar "un programa de deuda certero y sostenible" de cara al futuro.
"El programa de mejora del perfil de deuda local da confianza y protege el ahorro argentino. Fortalece la posición del Estado y nos da la tranquilidad de poder pensar la Argentina con un programa de deuda certero y sostenible", señaló. Y agregó: "Terminan así los mitos que anunciaban que existía una bomba de deuda que iba a explotar".