La Casa Blanca habría asumido una postura en contra de las "provocaciones" de Ucrania contra objetivos rusos, en particular con respecto al envío de drones hacia el territorio de Rusia. Según reportó este miércoles el periódico La Repubblica, Washington teme que dichas acciones conduzcan a una peligrosa escalada si Moscú se ve obligado a responder con dureza.
Según el medio, los nuevos datos de inteligencia reseñados por The New York Times, que sugieren que un grupo proucraniano fue responsable de la voladura de los gasoductos Nord Stream, hecho perpetrado en septiembre, podrían ser una advertencia sobre nuevas provocaciones.
Los datos de The New York Times no detallan quién formó parte del grupo que atacó los gasoductos, ni quién dirigió la operación o pagó por su realización, pero las fuentes hicieron hincapié en que ningún ciudadano estadounidense ni británico participó en el sabotaje.
Unas horas después de la publicación del diario estadounidense, el medio alemán Die Zeit también publicó un artículo sobre el asunto, en el que afirmaba que investigadores alemanes habían identificado el buque presuntamente implicado en el ataque a los gasoductos y señalaba que "las huellas conducen en dirección a Ucrania".
Por su parte, The Times reportó que los países occidentales sabían de la implicación de una empresa privada ucraniana en el ataque a los gasoductos Nord Stream una semana después de su explosión.
Cabe recordar que el periodista estadounidense Seymour Hersh, ganador del premio Pulitzer en 1970, publicó el 8 de febrero un artículo en el que sostiene que fueron buzos de la Armada de EE.UU. quienes colocaron los explosivos bajo los Nord Stream en junio del 2022.
Reacciones del Kremlin
Este miércoles, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, declaró que los reportes realizados por The New York Times y Die Zeit son un "bulo mediático" coordinado y llevado a cabo para desviar la atención de los verdaderos autores del sabotaje.
"Está claro que los autores del atentado terrorista quieren desviar la atención. Está claro que se trata de un bulo mediático coordinado", dijo Peskov, añadiendo que el Kremlin está perplejo sobre cómo los funcionarios estadounidenses citados por los medios occidentales pueden sugerir cualquier cosa sobre los ataques sin una investigación previa.