EE.UU. e India impulsan la producción conjunta de chips para competir con China
EE.UU. e India firmaron un memorando de entendimiento para cooperar en la producción de semiconductores, anunció este viernes la secretaria de Comercio estadounidense, Gina Raimondo, que se encuentra realizando una visita de negocios en el país asiático.
La funcionaria afirmó que las partes mapearán juntas la cadena de suministro de semiconductores e identificarán oportunidades para empresas conjuntas y asociaciones tecnológicas, destacando que Nueva Delhi podría convertirse en un proveedor clave de piezas electrónicas y 'hardware' para Washington.
"Queremos profundizar nuestra relación tecnológica con India", expresó en una rueda de prensa posterior a la reunión con su homólogo indio Shri Piyush Gopal.
La visita de Raimondo se produce en medio de las restricciones estadounidenses de exportación cada vez más estrictas sobre la tecnología de fabricación de chips china que, según Washington, tienen como objetivo obstaculizar la capacidad de Pekín para expandir su industria de semiconductores y mejorar sus capacidades militares.
"Quiero ser también clara [...] esto no se trata de desvincularse, se trata de mantener los ojos bien abiertos sobre el hecho de que China está tratando explícitamente de obtener acceso a la tecnología estadounidense para usarla en su Ejército y necesitamos protegerla", aseveró al respecto la funcionaria.
En este sentido, en una entrevista con CNBC, realizada el mes pasado, Raimondo admitió que EE.UU. estaba considerando colaborar con India en ciertos trabajos de fabricación para impulsar la competencia contra el gigante asiático.
- Actualmente las dos mayores economías del mundo compiten por el dominio en áreas tecnológicas claves. En octubre pasado, el Departamento de Comercio de EE.UU. impuso restricciones al suministro de productos de supercomputación y semiconductores a 31 empresas chinas, entre ellas Yangtze Memory Technologies Corp. (YMTC), el principal fabricante chino de chips de memoria.
- Por su parte, en diciembre, Pekín presentó una demanda contra EE.UU. ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por intentar bloquear su sector de alta tecnología.