Un equipo de científicos descubrió que durante la construcción de la catedral de Notre Dame de París (Francia), en los siglos XII y XIII, se utilizaron soportes de hierro para unir los bloques de piedra.
El hallazgo convierte al templo en la primera catedral gótica conocida construida con el amplio uso de hierro como un refuerzo adicional de toda la estructura, según un estudio publicado en la revista Plos One.
El descubrimiento fue posible tras el devastador incendio que arrasó con la edificación en abril de 2019, mientras se realizaban obras de restauración planificadas. Las llamas destruyeron gran parte del templo, y desde entonces se han realizado trabajos de reparación sin precedentes para lograr su recuperación.
"El fuego ha arrojado luz sobre ciertos usos del hierro, como las grapas en la parte superior de las paredes superiores que estaban totalmente ocultas por el marco", manifestó Maxime L'Héritier, arqueólogo del Centro Nacional de Investigaciones Científicas y autor principal del estudio, en un correo electrónico a Gizmodo.
El análisis de 12 muestras de grapas de hierro de diferentes ubicaciones (tribunas, naves laterales y paredes superiores), seis de las cuales fueron sometidas a datación por radiocarbono, han indicado que se empezó a usar refuerzos de este material en la etapa más temprana de la construcción de Notre Dame, a principios de la década de 1160.
El reciente detalle no es la primera sorpresa que ha surgido durante las obras de restauración del templo, cuya reapertura se espera para finales del próximo año.
En 2022, se informó sobre el hallazgo de dos sarcófagos antropomorfos de plomo en el interior de la catedral. Ambos entierros pertenecen a un reconocido sacerdote y a un jinete de clase alta.
Los científicos ha indicado que además de nueva información sobre el método de construcción empleado en aquella época, el estudio también arroja nuevos datos sobre la circulación, el comercio y la forja del hierro entre los siglos XII y XIII.