Los legisladores del estado de Idaho (EE.UU.) aprobaron este lunes un proyecto de ley para permitir el uso de pelotones de fusilamiento en la ejecución de presos condenados a muerte.
La legislación estipula que solo se utilizará este método si las autoridades no consiguen obtener los fármacos necesarios para suministrar las inyecciones letales.
La iniciativa está en línea con la de otros estados que en los últimos años han revivido métodos de ejecución más antiguos debido a las dificultades para obtener los medicamentos necesarios para los programas de inyección letal. Las compañías farmacéuticas son cada vez más reacias a permitir que los verdugos usen sus productos, argumentando que están destinados a salvar vidas, no a ponerles fin.
Solo los estados de Misisipi, Utah, Oklahoma y Carolina del Sur cuentan actualmente con leyes que permiten pelotones de fusilamiento si no se dispone de otros procedimientos para ejecutar a los condenados.
Doug Ricks, senador republicano representante de Idaho, afirmó, citado por AP, que la dificultad del estado para encontrar drogas para la inyección letal podría continuar "indefinidamente" y que cree que la muerte por fusilamiento es "humana".
Por su parte, el también republicano Dan Foreman manifestó que tal ejecución traumatizaría a las personas que las llevan a cabo y a los que presencian la escena.