El Comité Olímpico Internacional (COI) comunicó este martes sobre su decisión de recomendar a las federaciones internacionales y a los organizadores de torneos que analicen la posibilidad de que se permita la participación de atletas rusos y bielorrusos en los diferentes campeonatos, pero solamente como atletas neutrales individuales.
Además, el COI aconseja que no se considere la participación de equipos de ambos países, así como tampoco se acepten a los atletas que apoyan la operación militar especial de Rusia en Ucrania o a deportistas miembros de las Fuerzas Armadas o agencias de seguridad nacionales. Asimismo, precisaron que se mantienen en vigencia las sanciones impuestas en febrero de 2022 contra Rusia y Bielorrusia, que les impide acoger eventos deportivos internacionales, prohíbe la exhibición de sus banderas u otros símbolos nacionales e himnos, así como tampoco se invitará a ningún funcionario de ambos países.
Por su parte, el presidente del Comité Olímpico de Rusia, Stanislav Pozdniakov, calificó esos criterios del COI de "discriminatorios" y una violación de los derechos humanos. Según Pozdniakov, esas decisiones son "una farsa" e infringen los propios principios del COI y de la ONU. El veto a los equipos es "una discriminación deportiva" y "exigimos igualdad de condiciones para los atletas de todos los países", instó el funcionario.
Respecto a la participación de los atletas rusos y bielorrusos en los Juegos Olímpicos de París 2024, el COI se reserva el derecho a tomar la respectiva decisión "en el momento adecuado". "Los JJ.OO. pueden servir de ejemplo para un mundo en el que todos respeten las mismas reglas y se respeten unos a otros. Pueden inspirarnos a resolver problemas construyendo puentes, lo que lleva a una mejor comprensión entre las personas. Pueden abrir la puerta al diálogo y la construcción de la paz, algo que la exclusión y la división no puede lograr", asevera la institución.
Injerencia política en el deporte
Asimismo, destaca que el movimiento olímpico rechaza "firmemente cualquier injerencia política" en el deporte, por lo que insta a las federaciones internacionales a decidir qué atletas pueden participar en los torneos en función de sus méritos deportivos y no por motivos políticos o por sus pasaportes.
En las consultas y deliberaciones "se prestó especial atención a las opiniones de la comunidad deportiva ucraniana", señala. También se consideraron los "otros 70 conflictos armados y guerras en curso en todo el mundo" y se determinó que los comités olímpicos nacionales de esas regiones afectadas "siguen los principios de la Carta Olímpica, y no solicitan la exclusión de los atletas de la otra parte en conflicto, y están permitiendo que sus deportistas compitan en los torneos internacionales sin restricciones", reza el comunicado.
Sin embargo, países como Ucrania, EE.UU., Canadá o el Reino Unido han presionado al COI para que prohíba la participación de deportistas rusos y bielorrusos en las competiciones internacionales y en los Juegos Olímpicos de 2024.