Un grupo de migrantes de distintas nacionalidades se acercó la tarde del viernes a las inmediaciones del gimnasio de Bachilleres, en Ciudad Juárez, localidad del norteño estado de Chihuahua, para pedir justicia por la trágica muerte en un incendio de 39 personas que se encontraban retenidas en una centro provisional del Gobierno.
En el marco de una visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Ciudad Juárez, los migrantes tomaron una de las vías por donde se trasladaba la caravana presidencial para intentar hablar directamente con el mandatario mexicano, pero no lograron tener éxito.
Según medios locales, las personas lograron interceptar la comitiva de López Obrador cuando salió de un evento programado que fue a puerta cerrada, en el que se reunió con empleados de la Secretaría de Bienestar.
"Queremos justicia", repetían los migrantes mientras intentaban frenar la caravana donde iba el mandatario, quien en horas de la mañana dijo que iba a revisar con los médicos de Bienestar la atención a heridos por la tragedia en el centro migratorio, para garantizar el servicio de salud de los lesionados.
Los migrantes pidieron escuchar las propuestas que podría tener López Obrador para solucionar la situación humanitaria mientras se trasladan por el territorio mexicano con la intención de solicitar asilo a EE.UU.
"Somos víctimas de las políticas de los gobiernos"; "Hoy fueron ellos, mañana podrán ser otros"; "Merecemos respeto"; "Somos seres humanos"; "No a la xenofobia"; "Los emigrantes no somos delincuentes", fueron algunos de los reclamos que expresaron los migrantes en la protesta.
La noche del pasado lunes, se registró un incendio en el área de alojamiento de la estación provisional de Ciudad Juárez, una sede migratoria a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM). El incidente dejó 39 migrantes de Centroamérica y Suramérica fallecidos, y otras 27 personas en estado delicado-grave