Varios activistas de la Iglesia ortodoxa de Ucrania (PTsU, por sus siglas en ruso), promovida por Kiev, trataron de apoderarse este sábado de la catedral de Alejandro Nevski, en la ciudad de Kamenets-Podolski, en la provincia ucraniana de Jmelnitski.
Durante el asalto, uno de ellos hizo el saludo nazi frente al templo, perteneciente a la Iglesia ortodoxa canónica ucraniana del Patriarcado de Moscú (UPTs), informa la Unión de Periodistas Ortodoxos.
Las tomas de iglesias por la fuerza se han convertido en algo habitual en Ucrania. El sábado, simpatizantes de la PTsU asaltaron y se apoderaron de la catedral de San Miguel de la ciudad de Shepetovka, también en la provincia centrooccidental de Jmelnitski. Al entrar en el templo, los radicales "exigieron agresivamente a los fieles de la UPTs que dejaran de rezar, tras lo cual comenzaron a aplaudir con fuerza y a gritar sus consignas".
Además, un grupo de hasta 50 personas intentó este miércoles apoderarse de una catedral en la ciudad de Lvov.
Los hechos tienen lugar mientras continúa la persecución masiva por parte de las autoridades ucranianas contra la Iglesia ortodoxa canónica del país, en el centro de la cual se encuentra el Monasterio de las Cuevas de Kiev. A finales de marzo, las autoridades ucranianas solicitaron que los monjes abandonaran el lugar, pero los clérigos se negaron a hacerlo.