Australia y China han llegado a un acuerdo para tratar de resolver la disputa comercial en torno a los altos aranceles impuestos por Pekín a la cebada australiana, informa ABC.
El Gobierno chino se comprometió a realizar una "revisión acelerada" de sus aranceles durante un periodo de tres meses, que podría extenderse un mes más si fuera necesario, anunció este martes la ministra de Exteriores australiana, Penny Wong. A cambio, Canberra suspendería temporalmente la apelación contra esa medida presentada ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), agregó.
Sin embargo, Australia se reserva el derecho a retomar la apelación ante la OMC en caso de que China no elimine el arancel a la cebada. Pekín impuso en 2020 un impuesto del 80,5 % a las importaciones del cereal australiano durante cinco años, con lo que prácticamente cerró su mercado al país oceánico, que anualmente exportaba cebada al gigante asiático por un valor total de hasta 1.500 millones de dólares australianos (unos 998 millones de dólares estadounidenses).
El vino podría ser el siguiente
China es el mayor socio comercial de Australia y la cebada es una de sus tres principales exportaciones agrícolas. Pekín sostuvo que impuso el arancel por competencia desleal y subsidios estatales de Canberra para distorsionar el mercado. Australia negó esas acusaciones y recurrió a la OMC, que según fuentes citadas por ABC, en los próximos días iba a emitir un dictamen previsiblemente favorable para el país oceánico.
El cereal es solo uno de los varios productos australianos a los que Pekín impuso altas tarifas, que incluyen el vino, el carbón, la langosta y la madera, entre otros. En caso de que el nuevo acuerdo termine en buen puerto, el Gobierno australiano seguiría un proceso similar para revertir los aranceles sobre el vino, adelantó Penny Wong.