Cuatro fieles de la Iglesia Internacional Buenas Noticias murieron de hambre en Kenia después de seguir las instrucciones de su líder religioso para ayunar y salvarse de una supuesta "muerte dolorosa en el mundo", informan medios locales. Las víctimas pasaron varios días sin comida ni agua en la aldea de Shakahola, en la circunscripción de Magarini.
Según informes policiales, los agentes acudieron al lugar después de una denuncia y encontraron a 15 personas con signos de desnutrición, cuatro de ellas en estado crítico. Sin embargo, estas últimas fallecieron antes de llegar al hospital.
''Ciudadanos ignorantes murieron de hambre con el pretexto de encontrarse con Jesús después de que un sospechoso les lavara el cerebro, un tal Paul Mackenzie Nthenge, pastor de la Iglesia Internacional Buenas Noticias'', se lee en el informe policial.
El sospechoso, quien era un controvertido telepredicador, ha estado en la mira de los detectives por supuestamente predicar una doctrina peligrosa que alienta a sus seguidores a morir de hambre para llegar al cielo más rápido. El pastor Mackenzie ya fue detenido el mes pasado por la muerte por inanición de dos menores y posteriormente obtuvo la libertad bajo fianza.
A pesar de que estuvo presente en el lugar del crimen cuando la Policía rescató a las víctimas, el pastor no fue arrestado.
Los creyentes declararon que les habían ordenado ayunar para evitar una "condena apocalíptica". Después de la muerte de estas cuatro personas, Victor Kaudo, un defensor de los derechos humanos local, exigió que se tomen "medidas drásticas" contra el sospechoso y sea detenido.
Además, la Policía encontró una fosa común poco profunda en una zona boscosa de Shakahola, aunque no pudieron investigar debido a la hostilidad de los residentes que se cree son seguidores del pastor Mackenzie.