La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pidió este martes a los países de la Unión Europea que mantuvieran una postura común respecto a China, subrayando que el bloque debe reducir su dependencia del gigante asiático en materia de recursos clave.
"Una política europea sólida hacia China se basa en una fuerte coordinación entre los Estados miembros y las instituciones de la UE con la voluntad de evitar la táctica de 'divide y vencerás' a la que sabemos que podemos enfrentarnos. En los últimos días y semanas ya hemos visto estas tácticas en acción y ahora es el momento de que Europa pase también a la acción. Ahora es el momento de demostrar nuestra voluntad colectiva", declaró durante un discurso ante el Parlamento Europeo.
Estos comentarios se produjeron después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, se pronunciara en contra de arrastrar a la UE al conflicto de Taiwán. "La pregunta que los europeos deben responder es: ¿nos interesa acelerar [una crisis] en Taiwán? No. Lo peor sería pensar que los europeos debemos convertirnos en seguidores en este tema y seguir el ejemplo de la agenda de EE.UU. y tener una reacción exagerada de China", afirmó tras su visita a China.
Señaló que Europa debía ser más independiente de EE.UU. para no quedar atrapada en crisis que no son suyas, subrayando la importancia de la "autonomía estratégica" para el Viejo Continente y la necesidad de reducir la dependencia de Washington en cuanto a armas y energía.