Este martes se realiza en Colombia la Conferencia Internacional sobre el Proceso Político en Venezuela, convocada por el presidente colombiano Gustavo Petro.
Este encuentro, que se lleva a cabo en el Palacio de San Carlos, sede de la cancillería en Bogotá, ha generado gran expectativa en la región. A él asisten representantes de 19 países de América, África y Europa con la finalidad de plantear soluciones con miras a la reanudación de las conversaciones entre el Gobierno venezolano y la oposición, en el contexto de las elecciones de 2024.
Del mismo modo, el acento se ha puesto en la petición del levantamiento de las medidas punitivas impuestas por EE.UU. contra el país suramericano, como mecanismo de presión para conseguir la salida no electoral del presidente Nicolás Maduro.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, escribió este martes en su cuenta de Twitter que en la cumbre se harán "recomendaciones al Gobierno y la oposición venezolana con el fin de llegar a una decisión libre y soberana del pueblo".
¿Quiénes participarán?
Hasta ahora, informó la Cancillería colombiana, estarán presentes 19 países, que son: Alemania, Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, España, EE.UU., Francia, Honduras, Italia, México, Noruega, Portugal, Reino Unido, San Vicente y las Granadinas, Sudáfrica y Turquía. Además, participará el alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
¿Cómo se podrá ver la cumbre?
El Ministerio de Relaciones Exteriores informó que la cumbre será transmitida en directo en los portales de presidencia colombiana y la Cancillería.
Al finalizar la jornada, el titular de esa cartera entregará declaraciones a los medios de comunicación.
Las exigencias de Venezuela
El pasado lunes, Maduro afirmó que tenía una "expectativa positiva" sobre la conferencia, a la que calificó como "una jugada riesgosa", que consideró que debía hacerse y por eso la apoyó.
La expectativa del mandatario venezolano es que el encuentro internacional sea "para el respeto de la soberanía, la autonomía y la autodeterminación" y para buscar el levantamiento de todas las sanciones "sin condicionamiento de ningún tipo", afirmó. "No aceptamos menos, no nos transamos por menos", ratificó.
El mandatario venezolano también le pidió a Petro, al canciller colombiano, Álvaro Leyva, y a los países que participan en la cumbre, que en el comunicado final se incluya la exigencia de que EE.UU. desembolse 3.200 millones de dólares "secuestrados en las cuentas bancarias en el exterior para el plan social firmado en el acuerdo parcial de México, en noviembre de 2022".
"Una vez que depositen, vamos a México otra vez. Si no hay cumplimiento del acuerdo, olvídense de ese camino, porque si lo firmas es para cumplirlo", recalcó.
Recordó que durante sus diez años de Gobierno había hecho cientos de llamados al diálogo a los sectores opositores "en función de la paz". "Ahora vamos a este episodio, expresó, le deseo mucha suerte a Petro".
¿Qué se espera de la cumbre?
El pasado domingo, al terminar la reunión con representantes de la Plataforma Unitaria, el canciller colombiano expresó que los gobiernos presentes "hablarán sobre Venezuela y cada uno expresará lo que considera con respecto a una solución".
Destacó que el acuerdo al que se llegue, "tiene que ser entre venezolanos", lo que implica "un cronograma electoral con garantías y el levantamiento de sanciones en paralelo".
"Estamos en una búsqueda de soluciones", agregó el diplomático, tras resaltar que "una circunstancia especialísima" hizo que Petro convocara el encuentro. "Colombia es un país garante, en cabeza del presidente. No es fácil pero no vamos a eludir ese compromiso", expresó.
¿Cuál es la postura de Petro?
El pasado jueves, el mandatario colombiano consideró que la solución de las tensiones en Venezuela pasa por lograr una balanza que permita avanzar en los dos rieles: comicios y sanciones.
Sobre el tema electoral, el mandatario colombiano se ha referido en varias oportunidades al retorno de Venezuela al Sistema Interamericano de Derechos Humanos, lo que a su juicio daría pie para que existan unas elecciones con garantías.
Petro aclaró que esta propuesta no significa regresar a la Organización de Estados Americanos (OEA), instancia de la que el Gobierno venezolano salió por las acciones de injerencia del organismo contra el país.
Venezuela denunció a ese organismo regional en 2017, por su "intervencionismo" en la política interna. La decisión se hizo efectiva en 2019.
Previamente, en 2012, denunció a la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que da base jurídica a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. La determinación se cristalizó un año después.
En cuanto a las medida punitivas, Petro se ha referido a la "desactivación progresiva y paulatina de las sanciones" contra Caracas, para que la población pueda decidir "libremente, sin sanciones, sin presiones, su propio destino social y político".
¿Hacia dónde apunta la Conferencia?
Leyva aseguró que tenía el "pálpito" de que el acuerdo iba a alcanzarse, "porque el momento es y no hay otro".
Adelantó que entre las posibles determinaciones a las que lleguen las partes estarían unas elecciones, en 2024, "con todas las reglas propias del Sistema Interamericano", y según los resultados, "otro proceso electoral, en 2025, que tiene que ver con cuerpos colegiados y todas aquellas elecciones de Asamblea, concejos y gobernaciones".
Calificó esta conferencia como una "oportunidad" para que el Gobierno venezolano y la oposición se reencuentren en "democracia, en reglas del juego claras para todos los que quieran participar libremente en unas elecciones".
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