La subsecretaria del Departamento de Defensa de EE.UU., Kathleen Hicks, ha expresado en una entrevista con Bloomberg que el conflicto en Ucrania está enseñando a su país valiosas lecciones para un posible enfrentamiento con China.
"El conflicto en Ucrania nos ha aportado muchas ventajas para un posible desafío en el Pacífico", afirmó la funcionaria del Pentágono, agregando que Washington está aprendiendo a "hacer crecer" su base industrial que "durante los últimos 60 años estuvo un poco en un ciclo de fiesta y hambruna".
En este contexto, Hicks recordó que uno de los desafíos principales en el suministro de ayuda militar a Kiev consiste en que muchos contratistas de defensa se han mostrado reticentes a aumentar la producción de municiones porque creen que EE.UU. podría dejar de comprarlas en uno o dos años. Así, el Pentágono quiere dar a los fabricantes de armas más previsibilidad mediante contratos a más largo plazo.
Según la alta funcionaria, a pesar de la ayuda a Ucrania, el principal objetivo de EE.UU. seguirá siendo la competencia con China en el Pacífico. "No estamos intentando sopesar entre dos teatros. Tenemos una estrategia clara centrada en China", declaró.
El volumen total de asistencia militar de Washington a Kiev desde el comienzo de la operación especial militar rusa ya ha alcanzado los 35.400 millones de dólares, y desde que Joe Biden llegó a la presidencia de EE.UU. ha ascendido a 36.100 millones de dólares.
Mientras, EE.UU. y Filipinas continúan los mayores ejercicios militares conjuntos de su historia. De parte de las Fuerzas Armadas filipinas participan 5.400 uniformados, mientras que Washington desplegó 12.200 efectivos.
Los ejercicios se llevan a cabo en un momento de nuevas tensiones en el mar de la China Meridional. Esa región ha sido una fuente constante de tensión durante años al ser objeto de reclamos territoriales y marítimos de múltiples actores: China, Vietnam, Filipinas, Taiwán, Malasia, Indonesia y Brunéi.