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Clientes indignados llaman a boicotear a Maybelline por asociarse con una 'influencer' transgénero
En las últimas semanas, Dylan Mulvaney ha estado en el foco de la polémica por sus asociaciones con otras grandes marcas como Nike y la cervecera Bud.
La marca de cosméticos Maybelline ha causado indignación entre parte de su clientela y otras personas por su asociación con la 'influencer' transgénero estadounidense Dylan Mulvaney, que ha provocado llamados a boicotear la compañía.
Para celebrar el primer aniversario de su transición de género, Mulvaney publicó en redes sociales imágenes de su proceso de maquillaje con productos de Maybelline y el resultado. En la publicación, indicó que es "socia" de la empresa.
Maybe he’s born with it, maybe it’s Maybelline 💄The new face of Maybelline, ladies! pic.twitter.com/rx0EdvOlP3
— Oli London (@OliLondonTV) April 24, 2023
Numerosas usuarias de Maybelline e internautas reprobaron las imágenes, tachándolas de una "falta de respeto" y "burla contra las mujeres", por lo que llamaron al boicot y a botar a la basura los productos de la compañía.
Críticas en redes sociales
"A lo mejor las damas ya no están dispuestas a desfilar como muñecas pintadas" y por esta razón recurren a personas como Mulvaney, comentó una usuaria de Twitter. "El hombre Dylan Mulvaney es ahora el rostro de Maybelline", criticó otra internauta. "Lo que da más miedo es que él dice que quiere ser una niña, no una mujer", condenó una tercera. "Maybelline se está asociando con la degradación de las mujeres" y "esto es ofensivo para las féminas", son algunas de las demás críticas.
Dylan Mulvaney es un hombre biológico que a inicios de 2022 empezó a documentar en las redes sociales su transición de género, mientras que en diciembre pasado se sometió a una cirugía de feminización facial. En su canal de TikTok, Mulvaney cuenta con casi 11 millones de seguidores y ha ganado popularidad por sus entrevistas con personalidades de alto perfil, incluyendo el presidente de EE.UU., Joe Biden, celebrada en octubre pasado.
En las últimas semanas, la 'influencer' transgénero ha estado en el foco de la polémica por sus asociaciones con otras grandes marcas como Nike y la cervecera Bud, lo que provocó también llamados a boicotear a estas empresas.
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