La mandataria de Perú, Dina Boluarte, cumplió cinco meses de gobierno en medio de múltiples polémicas y graves denuncias. La más reciente emanada del informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que revela violaciones en el accionar de las fuerzas de seguridad durante las protestas antigubernamentales.
Ante esto, concedió una entrevista al diario local El Comercio, publicada el domingo, en la que reiteró que en su país no se han perpetrado ni ejecuciones extrajudiciales ni masacres. Del mismo modo, aseguró que en caso de encontrar violaciones de derechos humanos, los culpables deben ser los efectivos.
"Yo puedo ser la jefa suprema de las Fuerzas Armadas, pero no tengo comando, los protocolos los deciden ellos", aseveró Boluarte. "[Ni] los ministros ni la presidenta tenemos comando para decidir sobre los protocolos que las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional tienen. Ellos tienen su propia ley, pero también sus propios protocolos", aseveró.
No obstante, en Perú ya existe el precedente del exjefe de Estado, Alberto Fujimori, quien fue condenado a 25 años por delitos de lesa humanidad luego de que un tribunal concluyera que sí tenía comando sobre las Fuerzas Armadas.
Sobre esto fue consultado este lunes un abogado experto en temas policiales en la radio local Exitosa y explicó que, al ser la jefa suprema de ambas instituciones armadas, sí tiene mando.
"La presidenta de la República, como jefa suprema de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, sí tiene comandos sobre estas instituciones armadas y tiene comandos sobre esas instituciones armadas por una sencilla razón: tanto las Fuerzas Armadas como la Policía Nacional están subordinadas y le deben respeto a la investidura", dijo Juan José Santivañez.
En la entrevista con el diario local, Boluarte –en la misma línea que el presidente del consejo de Ministros, Alberto Otárola– señaló que todos los "casos específicos" en que murieron personas durante las movilizaciones son investigados por la Fiscalía de la Nación y su resultado debería ser "individualizado".
"Ellos tendrán que valorar en sus investigaciones, qué pasó, qué hubo, y de ser el caso identificar de manera individualizada a la persona. Eso es lo que hay en un Estado de derecho", sostuvo.
Choques diplomáticos
Boluarte, quien asumió el poder el 7 de diciembre de 2022 tras la destitución de Pedro Castillo, también aprovechó el espacio para reiterar sus críticas contra los gobernantes de otros países, como el mexicano Andrés Manuel López Obrador y el colombiano Gustavo Petro.
Por eso, lamentó la defensa que se ha hecho de Castillo, quien actualmente cumple pena preventiva por los presuntos delitos de rebelión y conspiración.
López Obrador y Petro han argüido que Castillo fue separado del cargo sin el debido proceso, razón por la cual han desconocido la legitimidad de Boluarte. De hecho, por esto el dignatario mexicano se niega a traspasar la presidencia 'pro tempore" de la Alianza del Pacífico.
"La injerencia extranjera hasta ahora existe, ahí tenemos las declaraciones del presidente López Obrador, de México, las del presidente Petro, en Colombia, o lo que dijo el señor Boric", afirmó Boluarte. "Eso es lo que me da pena de estos líderes de izquierda", remató.