Roma ha solicitado a París una disculpa "más clara" después de que el ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, acusara la pasada semana al Gobierno de Italia de no gestionar adecuadamente la afluencia de inmigrantes, y a su primera ministra, Giorgia Meloni, de mentir a los ciudadanos.
"Se necesitan palabras más claras", dijo este domingo el canciller italiano, Antonio Tajani, en una entrevista citada por Reuters. "Espero que el Gobierno francés cambie de postura y que llegue una disculpa que represente un contraste con las posiciones adoptadas por el ministro del Interior [Darmanin]. Estaré encantado de aceptarlas", agregó.
Tras las excusas de París, Tajani declaró el pasado viernes que el intento de Francia de poner fin al enfrentamiento con Italia por los comentarios de Darmanin contra Meloni fue "tibio" e "insuficiente" si se compara con la fuerza de las palabras del representante francés, aunque anteriormente había afirmado que París parecía haber comprendido la gravedad del ataque de su funcionario.
El 4 de mayo, Darmanin, invitado a la radio RMC, acusó a Meloni de ser "incapaz de resolver los problemas migratorios" en su país y mentir sobre la crisis. En particular, reprochó a Roma por ser responsable de la "afluencia de migrantes y, sobre todo, de menores" en el sur de Francia. En respuesta, Tajani, anuló esa misma jornada su visita a París, tachando de "insulto" las declaraciones del ministro francés.
La crisis migratoria en Italia y Francia
Las tensiones entre París y Roma a raíz de la inmigración surgieron en noviembre pasado, cuando el recién formado Gobierno de Meloni se negó a dejar atracar a un barco humanitario de una ONG, por lo que la nave con más de 200 inmigrantes a bordo finalmente fue acogida por Francia.
Desde entonces, las llegadas clandestinas en barco han aumentado con el desarrollo de un nuevo corredor marítimo entre Túnez e Italia. Según el Ministerio del Interior italiano, citado por la prensa francesa, este año han llegado al país por el Mediterráneo más de 42.000 personas, frente a casi 11.000 migrantes registrados el mismo período en 2022.
Según el director general de la Oficina Francesa de Inmigración e Integración, Didier Leschi, la cantidad de gente que intenta entrar en la región por tierra también va en aumento. Los inmigrantes que llegan a Italia, normalmente marfileños, guineanos o malienses, son más propensos a querer permanecer en Italia o Francia, donde sus comunidades ya están presentes, señaló.
"Por eso las tensiones entre ambos países son elevadas", agregó Leschi.