El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Alvaro Leyva, anunció un acuerdo con las autoridades venezolanas para localizar los restos mortales de desaparecidos en la zona de la frontera entre ambos países, tras las recientes declaraciones el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso.
En un comunicado, Leyva dijo que la decisión se tomó después de una reciente comunicación con su homólogo venezolano, Yván Gil Pinto.
"Acordamos proporcionar unos prontos y eficaces mecanismos institucionales, que permitan localizar los restos mortales de nacionales colombianos dados por desaparecidos en zona de frontera, sepultados en territorio venezolano, según manifestaciones del señor Salvatore Mancuso, excomandante de las autodenominadas Auto Defensas Unidas de Colombia, (AUC)", detalló.
Leyva recordó que Mancuso –que está preso en EE.UU. por narcotráfico– realizó esas declaraciones durante un acto en el que participó de manera virtual, el pasado 9 de mayo en Juan Frío, en el departamento de Norte de Santander, y durante su comparecencia ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el mecanismo de justicia transicional surgido tras la firma de los Acuerdos de Paz en 2016, al que busca someterse para recibir algunos beneficios judiciales.
"Más de 200 desaparecidos"
Mancuso afirmó ante la JEP que miembros de la AUC "ingresaron y dejaron fosas en Venezuela". "Allá hay por lo menos más de 200 personas desaparecidas", añadió el exjefe paramilitar, quien aseguró que estos hechos habrían ocurrido "entre el año 2000 y 2001".
El exjefe paramilitar se ofreció a ir hasta la zona donde los cadáveres fueron arrojados. "Yo les solicito de manera respetuosa que me permitan ir personalmente con ustedes para poder identificar esos lugares", agregó.
Los cuerpos de esas víctimas, detalló, estarían en San Cristóbal, Ureña, San Antonio, La Fría y Boca de Grita, en el estado venezolano de Táchira.
"Aceptamos la colaboración de Salvatore Mancuso para encontrar los restos de desaparecidos colombianos asesinados por el paramilitarismo y enterrados en Venezuela. Se trata de la reparación de las víctimas", escribió en Twitter el presidente de Colombia, Gustavo Petro.
El Gobierno de Colombia acusa a las AUC de haber cometido al menos 135 delitos de lesa humanidad, entre ellos homicidio, desaparición y desplazamiento forzado en contra de cerca de 8.000 víctimas directas e indirectas.
Entre los crímenes más conocidos de la agrupación se encuentran el desplazamiento masivo de Santa Rita y las masacres de Nueva Venecia, Trojas de Cataca y de Guáimaro, nombradas en referencia a las comunidades donde ocurrieron.
Directamente bajo el liderazgo de Mancuso, la Fiscalía de Colombia estima que al menos 600 personas fueron víctimas de homicidios selectivos, abusos sexuales, desplazamientos forzados, torturas, desaparición, secuestro extorsivo, reclutamiento de menores y violencia basada en género, entre otros delitos.