López Obrador quiere "establecer comunicación" con China para evitar el tráfico de fentanilo
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este martes su intención de establecer comunicación con el Gobierno de China para intercambiar información y evitar el tráfico ilegal de fentanilo.
"Queremos establecer comunicación. Lo que nos importa más que nada es que se logre un acuerdo para intercambiar información, que no llegue fentanilo, que no lleguen químicos de los puertos de China a México", dijo en la rueda de prensa matutina en el Palacio Nacional.
"Ellos pueden ayudarnos, estoy seguro de que van a actuar de manera responsable y van a corresponder a la amistad y a la cooperación que tenemos", agregó.
#EnLaMañanera | A raíz de una gran confiscación en puertos mexicanos, el @gobiernomx está en constante comunicación con la embajada de #China por el asunto del #fentanilo, precisa el presidente @lopezobrador_. pic.twitter.com/E2SgEqw8cO
— El Financiero TV (@ElFinancieroTv) May 16, 2023
El mandatario hizo estas declaraciones días después de asegurar que su Gobierno tiene "pruebas" de la llegada de un cargamento del potente opioide a México, presuntamente procedente de China, algo que Pekín niega.
López Obrador le ha enviado dos cartas al presidente de China, Xi Jinping, en las que le pide ayuda para afrontar esta lacra. La segunda fue después del decomiso de ese cargamento.
"Se está viendo ya el asunto, ya se está viendo con ellos, lo está viendo precisamente el almirante (José Rafael) Ojeda (secretario de Marina), que está aquí, él es el responsable de atender este tema con la Embajada de China en México", dijo.
Presión de Washington
El pedido a China ocurre en momentos en que Washington ha aumentado la presión a México para detener el tráfico ilícito de opioides sintéticos, particularmente fentanilo, ya que la nación norteamericana enfrenta una crisis por este tema, con más de 70.000 víctimas por sobredosis, tan solo en 2021.
El Gobierno mexicano niega que el país produzca fentanilo, pero la Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA, por sus siglas en inglés) afirma que se produce en México con precursores químicos procedentes de China.