Un nuevo terremoto de magnitud 7,1 se registró este sábado cerca de Nueva Caledonia, horas después de un sismo de 7,7, que activó la alerta de tsunami.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el sismo se produjo a una profundidad de unos 36 kilómetros.
Asimismo, la Oficina de Meteorología australiana declaró que no había amenaza de tsunami para Australia tras el sismo.