La Fiscalía de Colombia anunció este domingo que destinó un grupo especial de fiscales e investigadores para esclarecer la masacre de cuatro menores indígenas pertenecientes al pueblo Murui en el departamento de Caquetá.
Desde la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, presidida por Danilo Rueda, indicaron que los menores fueron asesinados cuando intentaban escapar de un reclutamiento forzado del frente Carolina Ramírez, de la disidencia del Estado Mayor Central, bajo el mando de 'Iván Mordisco'.
Tras conocerse el hecho, el presidente Gustavo Petro convocó a un consejo extraordinario de seguridad para "evaluar la situación de orden público" en el país. El mandatario calificó el asesinato como "un crimen atroz" y "una bofetada a la paz".