KFOR aumenta su presencia en el norte de Kosovo
La KFOR "aumentó su presencia en cuatro municipios del norte de Kosovo para reducir el riesgo de escalada, después de que alcaldes recién elegidos intentaran asumir el cargo", ha anunciado el organismo este martes a través de un comunicado oficial.
Según el informe, las tropas de la KFOR, como se conoce la misión de la OTAN para el mantenimiento de la paz en Kosovo, resultaron "atacadas por multitudes cada vez más agresivas", haciendo referencia a los enfrentamientos que se registraron en el municipio de Zvecan con los manifestantes serbios durante la jornada anterior.
El comunicado informa que un total de 30 efectivos de la misión multinacional han resultado heridos. "11 soldados del contingente italiano y 19 del contingente húngaro sufrieron heridas múltiples, incluidas fracturas y quemaduras por artefactos incendiarios explosivos improvisados", dijo la KFOR, agregando que "tres soldados húngaros resultaron heridos por el uso de armas de fuego".
"La KFOR seguirá tomando todas las medidas necesarias para garantizar un entorno seguro y protegido y la libertad de circulación de todas las comunidades en Kosovo", concluyó el organismo.
A su vez, la OTAN anunció la movilización de un grupo de fuerzas adicionales que estaban en "un estado de preparación". "Se ha ordenado a un batallón multinacional adicional de fuerzas de reserva que reduzca su estado de preparación para un despliegue de catorce días a siete días, a fin de estar listo para reforzar la KFOR si es necesario", comunicó la alianza.
Vucic exige "la retirada urgente de falsos alcaldes"
Por su parte, el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, se ha reunido con los embajadores de los países del llamado grupo Quinteto –compuesto por EE.UU., Reino Unido, Francia, Italia y Alemania– para hablar sobre la situación en Kosovo. El ministro de Defensa, Milos Vucevic, y el jefe del Estado Mayor de Serbia, el general Milan Mojsilovic, también asistieron al encuentro.
El mandatario informó acerca de la reunión este mismo día mediante una publicación en las redes sociales, donde subrayó que "los movimientos unilaterales de Pristina conducen a la violencia contra la comunidad serbia, lo que nos aleja de la paz y la estabilidad duraderas en la región".
"La retirada urgente de falsos alcaldes y miembros de las llamadas fuerzas especiales de la Policía de Pristina es una condición para preservar la paz en Kosovo y Metojia", exigió Vucic en una publicación en las redes sociales.
¿Qué pasa?
Al norte de Kosovo se registraron fuertes enfrentamientos entre las autoridades locales y manifestantes de etnia serbia, que exigen la retirada de las fuerzas de seguridad y la destitución de cuatro alcaldes recién elegidos. Tropas del contingente pacificador de la OTAN en Kosovo (KFOR), junto con la Policía local, dispersaron violentamente las manifestaciones.
El descontento de los manifestantes serbios se remonta al pasado viernes, cuando unidades policiales kosovares irrumpieron en varios edificios administrativos de la región con el objetivo declarado de ayudar a los nuevos alcaldes, de origen albanés, a ejercer sus funciones.
El despliegue policial, que tuvo lugar en medio de episodios de enfrentamiento con residentes y la colocación de banderas de Kosovo en edificios municipales, llevó al presidente serbio, Aleksandar Vucic, a declarar el estado de preparación militar máxima en el Ejército del país, lo que implica el desplazamiento de tropas hacia la frontera administrativa con Kosovo. Vucic también afirmó que las recientes tensiones fueron organizadas por el primer ministro de la región, Albin Kurti, con el objetivo de provocar "un conflicto entre los serbios y la OTAN".
Se trata de un nuevo ciclo de tensión al norte de Kosovo, donde hay una gran población de ciudadanos de etnia serbia, que se produce dos meses después de la reunión que Vucic mantuvo con Kurti. Aunque en este encuentro, auspiciado por el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, las partes llegaron a un acuerdo sobre cómo llevar a la práctica el plan occidental de normalización de relaciones expuesto en febrero, Pristina y Belgrado no lograron firmar ningún documento.