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¿Por qué Estados Unidos busca involucrar a Corea del Sur en la crisis de seguridad en Europa?
Un experto surcoreano en relaciones internacionales destaca que el grado de tensión entre Rusia y EE.UU. se exacerbará en el contexto de la lucha por influencia en la región.
El director del Centro de Asia y el Pacífico, con sede en Nizhni Nóvgorod, y profesor de la Escuela Superior de Estudios Internacionales de la surcoreana Universidad de Hanyang, Gu Ho Eom, ha esbozado en un artículo para el Club Internacional de Debates Valdái su análisis de la situación internacional.
El experto vaticina que, una vez haya concluido el conflicto ruso-ucraniano, el orden mundial cambiará y se dividirá en tres centros geopolíticos (Rusia y China, EE.UU. y sus aliados y el Sur Global), debido al objetivo de los actores de expandir su influencia y afianzar su hegemonía económica. También considera que, si bien es poco probable que el mundo caiga en la anarquía, el sistema actual de cooperación se verá socavado.
¿Cambio de postura de Corea del Sur?
Aunque el mantenimiento de las relaciones amistosas con Moscú es vital para la seguridad económica y nuclear de Seúl, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, mencionó por primera vez en abril en una entrevista a Reuters, poco antes de realizar una visita oficial a EE.UU., que su país podría enviar armas a Ucrania pese a su tradicional postura de no intervenir en los conflictos internacionales y mantener un equilibrio entre los lazos con EE.UU., China y Rusia.
"Si surge una situación que la comunidad internacional no puede tolerar, por ejemplo cualquier ataque a gran escala contra la población civil, masacres o violaciones graves de las leyes de la guerra, puede ser difícil para nosotros limitarnos solo al apoyo humanitario o financiero", dijo el mandatario surcoreano a la agencia.
De acuerdo con el experto, el actual Gobierno surcoreano parece estar tratando de cambiar con cautela la postura de su predecesor, Moon Jae-in, priorizando el fortalecimiento de las relaciones con EE.UU. y Japón. Al mismo tiempo, la Administración Yoon se ve obligada a prestar atención a su enfoque hacia Rusia, ya que Moscú tiene influencia en la cuestión nuclear de Corea del Norte. Además, unas 160 empresas surcoreanas operan en Rusia, por lo que cualquier deterioro en las relaciones entre Seúl y Moscú supondría una grave carga económica para el país asiático.
"Por lo tanto, no es fácil para Corea del Sur decidir suministrar armas a Ucrania, a pesar de la importante presión de Occidente sobre el Gobierno coreano, como lo demuestra la reciente y escandalosa filtración de datos clasificados de EE.UU.", opina Gu Ho Eom.
Los intereses de EE.UU. en Asia nororiental
Gu Ho Eom destaca que la razón principal por la que Washington insiste en que Seúl suministre armas a Ucrania es la escasez de suministros críticos, incluidas las municiones, pero EE.UU. también tiene en consideración sus extensas estrategias geopolíticas.
En primer lugar, EE.UU. está fortaleciendo el vínculo entre sus estrategias de seguridad para Europa y las de la región de Asia-Pacífico, ya que Washington considera su conflicto con Moscú como un conflicto que se integra gradualmente en el marco de su rivalidad con China. Como resultado, EE.UU. busca integrar a la OTAN en la naciente asociación AUKUS (Australia, Reino Unido y EE.UU.) y el foro QUAD (EE.UU., Japón, Australia e India), así como fortalecer la cooperación con Corea del Sur y Japón. En este contexto, Washington quiere que Corea del Sur establezca vínculos con la OTAN a través del apoyo militar a Ucrania.
El analista hace también hincapié en la ausencia en la región de Asia-Pacífico de una estructura de seguridad multilateral, como la OTAN, una circunstancia que hace que la respuesta de EE.UU. a potenciales conflictos armados en la zona (que podrían ser simultáneos) sea más difícil que en el teatro europeo. "Por lo tanto, la integración de los sistemas de seguridad entre Europa y la región de Asia y el Pacífico es una tarea urgente para Estados Unidos", concluye el profesor.
En segundo lugar, EE.UU. tiene la intención de bloquear la nueva política oriental de Rusia, curso que Moscú tomó después de la cumbre APEC de 2012. A día de hoy, Rusia ha elevado su cooperación estratégica con China al más alto nivel y al mismo tiempo fortalece la cooperación energética con Japón a pesar de la cuestión de las islas Kuriles, además de enfatizar la cooperación trilateral con Corea del Sur en la cuestión nuclear norcoreana.
Al reconocer que la expansión de la cooperación económica entre Rusia y Corea del Sur (así como con Japón) tiene el potencial de socavar la estrategia del Indo-Pacífico de EE.UU., Washington buscará causar un daño irreparable tanto a las relaciones chino-japonesas como a las ruso-surcoreanas, indica el experto.
La posición de Rusia
Gu Ho Eom comentó la brusca reacción de la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, que afirmó que cualquier suministro de armas a Ucrania sería percibido como un acto hostil contra Rusia y que "tales medidas tendrían un impacto extremadamente negativo en las relaciones bilaterales con los Estados que las tomaran".
La Federación de Rusia alberga ciertas preocupaciones respecto a la posibilidad de que Corea del Sur apoye a Ucrania mediante la exportación de armamento alternativo, por lo que la diplomática advirtió a Seúl de que Moscú tendrá en cuenta tales decisiones a la hora de formar sus posturas sobre cuestiones que afectan los intereses de seguridad de países que envían armas a Ucrania, como por ejemplo "enfoques para resolver la situación en la península de Corea".
Pronósticos a la situación en torno a Corea del Sur
El experto no descarta la posibilidad de que en el futuro las tensiones de seguridad en el noreste de Asia aumenten, lo que dificultará la creación de mecanismos eficaces para la resolución de problemas. Además, es poco probable que EE.UU. tolere los intentos de Corea del Sur de crear un sistema de cooperación multilateral con China y Rusia. Como resultado, Seúl se enfrenta a dificultades para llevar a cabo una diplomacia práctica y considerada, sostiene el analista.
En lo que le respecta a Moscú, el politólogo agregó que, para reducir la influencia de EE.UU. en la región, "Rusia debe continuar con su enfoque actual de visión de futuro sobre el problema nuclear de Corea del Norte en nombre de la paz en la península coreana".
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