Algunos países integrantes de la OTAN estarían dispuestos a desplegar tropas en Ucrania en caso de que otros miembros no ofrezcan suficientes garantías de seguridad a Kiev, en el marco de la próxima cumbre de la Alianza Atlántica, que se celebrará a mediados de julio en la capital lituana, Vilna, según ha declarado el ex secretario general de la organización Anders Rasmussen, citado por The Guardian.
El político danés también indicó que la cuestión del futuro ingreso del país eslavo a la OTAN no quedará fuera de la agenda de la reunión, ya que habrá Estados que aborden este asunto, independientemente de lo que se decida sobre las garantías.
"Si la OTAN no consigue ponerse de acuerdo en un camino claro para Ucrania, existe una clara posibilidad de que algunos países actúen individualmente […] quizá incluyendo la posibilidad de tropas sobre el terreno", afirmó Rasmussen y agregó que una de las naciones más comprometidas en proporcionar ayuda concreta a Ucrania es Polonia, cuyo ejemplo podrían seguir "los Estados bálticos".
"Creo que los polacos se plantearían seriamente entrar en acción y formar una coalición de voluntarios, si Ucrania no consigue nada en Vilna", aseveró.
Las declaraciones de Rasmussen tuvieron lugar después de que el actual jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmara que la cuestión de las garantías de seguridad para Kiev sería discutida en la próxima cumbre, aunque señaló que la Alianza, en virtud del artículo 5 del Tratado de Washington, solo ofrece garantías de seguridad absolutas a los miembros de pleno derecho.
Según Rasmussen, estas garantías deberían incluir el intercambio de datos de inteligencia, el entrenamiento conjunto de las fuerzas de Ucrania, una mayor producción de municiones, la cooperación dentro de la OTAN y nuevos suministros de armas. Además, opinó que sería totalmente legal que Kiev solicitara dicha ayuda militar.
"No va a ocurrir pronto"
Mientras tanto, varios de los miembros de la Alianza dicen abiertamente que Ucrania no puede ahora cumplir con "muchas de las condiciones" necesarias para adherirse a la organización.
Así, la ministra de Asuntos Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, sostuvo la semana pasada que la OTAN no puede hablar sobre la adhesión de nuevos miembros en medio del conflicto armado en Ucrania. Por su parte, el ministro de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, también señaló que la incorporación de Ucrania "no va a ocurrir en Vilna, no va a ocurrir pronto".