El presidente de Uruguay rectifica ante las críticas y no convertirá un águila nazi en paloma de la paz
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, ha suspendido este domingo su plan para fundir un águila de bronce de 350 kilos que decoró un acorazado nazi y convertirla en una paloma de la paz, después de las críticas que ha suscitado la medida en el ámbito cultural y político, informa La Diaria.
Durante una intervención en la Torre Ejecutiva, Lacalle Pou dijo que albergaba desde hace tiempo la idea de transformar este símbolo de violencia y de guerra en uno de paz, y que incluso el artista y el fundador del Museo de Arte Contemporáneo, Pablo Atchugarry, se había comprometido ya a realizarla. Sin embargo, el anuncio del proyecto, el pasado viernes, desató disensiones, incluso en el seno Gobierno, que le han llevado a reconsiderar el proyecto.
"Hay una abrumadora mayoría que no comparte esta decisión, y si uno quiere generar paz, lo primero que tiene que hacer es generar unión, y esto no lo ha hecho", declaró el mandatario en rueda de prensa. Aunque dijo estar convencido de que es "una buena idea", agregó que "a un presidente le corresponde escuchar y representar". El escultor coincidió con esta opinión en las redes sociales.
Esta iniciativa, cuya comunicación generó polémica en el Uruguay, quedó definitivamente cancelada. Decisión que comparto, porque un símbolo de paz y de unión no puede nacer desde la discordia.
— MACA Fundación Pablo Atchugarry (@fpatchugarry) June 18, 2023
Algunos senadores también se pronunciaron en contra de convertir la escultura del águila, que sostiene una esvástica entre sus garras, en algo nuevo. El senador Guido Manini Ríos, líder del partido derechista Cabildo Abierto, expresó que el águila no propaga el nazismo, sino que, por el contrario, "constituiría un atractivo turístico que beneficiaría a esa localidad".
Por su parte, Ope Pasquet, diputado del Partido Colorado, propuso donar la estatua a Alemania, para que sean los alemanes "quienes ajusten cuentas con su pasado". Otro miembro del Partido Nacional, Aldo Lamorte, no solo se mostró indignado por la decisión de Atchugarry, sino que dijo no comprender por qué un artista tan prestigioso podría aceptar "destruir una pieza histórica para realizar una suya".
El águila fue recuperada en 2006 en el Río de la Plata del acorazado alemán Graf Spee, hundido en 1939 en los albores de la Segunda Guerra Mundial. La escultura de bronce mide 2,8 metros de largo y 2 de alto.