El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, afirmó en una entrevista que prefiere que le recriminen por el uso del avión oficial a que le critiquen por tramas de corrupción como "la Gürtel o la operación Kitchen", que involucran al conservador Partido Popular (PP).
Así respondía el presidente español al ser preguntado por el uso del avión presidencial oficial, algo por lo que ha recibido críticas reiteradas durante su mandato desde la oposición, que le ha acusado de utilizar este bien público para fines privados.
Sánchez adujo que no comprendía esas críticas, puesto "que es un medio de transporte aéreo que utilizan todos los presidentes del Gobierno" y que, de hecho, fueron adquiridos por un mandatario de derechas. "Si gano las elecciones, te invito a dar una vuelta en el Falcon", zanjaba el político con humor la cuestión.
Durante la media hora de entrevista, Sánchez abordó algunos de los temas que se han convertido en el centro del debate político, cuando queda poco más de un mes para las elecciones generales anticipadas que se celebrarán el próximo 23 de julio.
Uno de ellos fue el ascenso de la ultraderecha en el país, de la mano del partido político Vox, al que acusó de romper los consensos, especialmente en temas como la violencia de género y el cambio climático.
No obstante, reiteró que "más peligroso que Vox defendiendo esta agenda contrarreformista es un Partido Popular (PP) que asume en primera persona los postulados de Vox".
Para el mandatario, "el dúo entre PP y Vox, que está en una agenda contrarreformista", podría llevar al país a un retroceso de hasta 50 años.
Apelando a cuatro años más
En contrapunto, defendió que su Gobierno ha hecho "cosas muy importantes en circunstancias extremadamente difíciles", y que las transformaciones que ha acometido "necesitan cuatro años más para consolidarse".
En este ámbito electoral, Sánchez señaló que después de las elecciones municipales y regionales han pasado dos cosas "muy importantes que los ciudadanos no sabían antes". En primer lugar, se refirió a la constatación de que el PP está dispuesto a formar Gobierno con Vox, como ya ha sucedido en diversas regiones.
En segunda instancia, a que el espacio a la izquierda del Partido Socialista, que estaba fragmentado, se ha vuelto a "recomponer" por la labor de la actual ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
"España está teniendo un desempeño económico que otros líderes europeos miran con admiración"
Aunque reconoció que en el país todavía quedan muchos problemas que solucionar, como el acceso a la vivienda, la inflación o el desempleo, Sánchez presumió que España está creciendo más que la media europea, que su Gobierno ha creado 1,4 millones de puestos de trabajo con respecto a 2018, que la reforma laboral ha limitado la temporalidad y sacó pecho por la subida del salario mínimo interprofesional.
Asimismo, el presidente destacó la diferencia del compromiso social y de reforma del Ejecutivo que lidera con respecto a lo que ocurrió durante la crisis financiera de 2008, apuntando a medidas como la rebaja de impuestos a los alimentos, la energía y la electricidad, o la gratuidad de los trenes de cercanías para estudiantes y trabajadores. En total, cifró en 45.000 millones de euros los desplegados en poco más de un año desde que se inició el conflicto en Ucrania.
Feminismo "incómodo"
La polémica sobre el feminismo volvió a acaparar una parte de su entrevista. Sánchez matizó sus palabras sobre el hecho de que algunos hombres se sientan incómodos con los discursos feministas, y defendió que el movimiento ha sido "la fuerza más transformadora social del país".
"El feminismo es una causa que trasciende lo ideológico, que toca de lleno los derechos humanos"
Sin embargo, sostuvo que "no en el fondo de las políticas, sino en la forma de expresar algunas de las posiciones políticas, en relación con el feminismo, por parte de la ministra de Igualdad, han hecho que haya gente que se sienta incómoda".
"El feminismo es una causa que trasciende lo ideológico, que toca de lleno los derechos humanos, porque de lo que estamos hablando es de la igualdad real y efectiva del 51 % de la población española y mundial", afirmó Sánchez, que abogó por realizar discursos más amplios e integradores para no dar "argumentos" a las formaciones de ultraderecha, que sostienen que el género es una "ideología".
Acuerdos con EH Bildu
Sánchez también habló de las críticas recibidas por haber pactado diversas medidas con el partido independentista vasco EH Bildu, considerado heredero del brazo político de ETA, pero que ha condenado la violencia de la banda terrorista reiteradamente.
Opinó que cuando esos acuerdos son criticados desde la derecha, se trata de "instaurar una gran mentira, un gran engaño" para no hablar de las leyes resultantes, entre las que ha citado la ley de eutanasia, la reforma laboral, la revalorización de las pensiones o la ley educativa.
"Con cualquier formación política con la que yo pueda entenderme para subir el salario mínimo interprofesional, para seguir aprobando leyes en favor de la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres, o para todas las conquistas sociales que hemos aprobado en esta legislatura, yo lo haré", reivindicó Sánchez, que sostuvo que "lo importante no es con quién se hace, sino para qué se hace".
Finalmente, volvió a subrayar que "la amenaza de la ultraderecha es real y no solamente porque hay gente que la apoya, sino porque hay un Partido Popular que le ha abierto las puertas en par para gobernar y ha asumido en primera persona muchas de sus tesis".