Hace tres semanas, Cecilia Strzyzowski se despidió de su familia supuestamente para irse de viaje con su novio, pero jamás se volvió a saber nada de ella.
El caso sigue provocando una conmoción en Argentina debido a los vínculos políticos que tenían los principales acusados de lo que se investiga como un feminicidio, aunque todavía no se ha encontrado ningún cuerpo.
Esta semana ha sido clave para la investigación, ya que Gustavo Obregón, uno de los imputados, confesó que él y César Sena, novio de la joven de 29 años, habían arrojado su cuerpo sin vida a un río.
El Equipo Fiscal Especial que investiga la desaparición de Cecilia, ocurrida el pasado 1 de junio en la provincia de Chaco, en el norte del país, ordenó entonces un rastrillaje que permitió el hallazgo de un dije parecido al que usaba la víctima y de restos óseos, pero todavía no han sido peritados para saber si se trata de ella.
Nelia Velásquez, una de las fiscales, explicó que las pruebas recolectadas primero serán analizadas y, una vez que se conozcan los resultados, se darán a conocer a la familia, lo que podría ocurrir la semana próxima
Mientras tanto, Emerenciano Sena y Marcela Acuña, los padres de César que están detenidos y acusados como cómplices del crimen, aceptaron declarar por primera vez. Ambos clamaron inocencia.
Impacto
Hasta ahora hay siete imputados que permanecen en prisión.
César Sena, el novio, quedó acusado de homicidio triplemente agravado por el vínculo, por el concurso premeditado de dos o más personas y por haberse realizado en un contexto de violencia de género.
Su madre, Marcela Acuña, y su padre, Emerenciano Sena, fueron imputados como coautores. Son dos poderosos líderes sociales del Chaco que tenían vínculos personales y políticos con el gobernador Jorge Capitanich.
Fabiana González, asistente de Acuña, fue considerada "partícipe necesaria"; y su esposo, Gustavo Obregón, "partícipe secundario", al igual que Gustavo Melgarejo y Griselda Reynoso, una pareja que cuidaba una de las casas de los Sena.
De todos ellos, Acuña, Sena, González y Obregón formaban parte de las listas oficialistas que iban a competir el domingo pasado en las elecciones internas de candidatos a legisladores e intendentes provinciales.
Son las listas que encabezaba Jorge Capitanich, el gobernador de Chaco, que busca su tercera reelección y que quedó en medio del escándalo provocado por la desaparición de Cecilia.
Aunque las candidaturas de los acusados fueron anuladas, todavía era una incógnita la manera en que el caso iba a repercutir en Capitanich.
Sin embargo, el gobernador ganó la candidatura del Frente Chaqueño con el 36 % de los sufragios y se convirtió en el candidato más votado de esa jornada.
Con estos resultados, Capitanich se encamina a la reelección en los comicios provinciales que se realizarán el 17 de septiembre y que, de cualquier manera, seguirán marcados por un crimen que ha mantenido en vilo al país.