Lockheed Martin, el contratista de defensa de mayor facturación en el mundo, superó a su rival General Dynamics al llevarse un contrato con el Ejército de EE.UU. para desarrollar un sistema de guerra electrónica de largo alcance, inteligencia y cibernético que el servicio considera fundamental en un supuesto conflicto contra adversarios tan fuertes como China o Rusia.
Bajo el nuevo contrato, que tiene un importe de casi 37 millones de dólares, Lockheed construirá en 21 meses un prototipo del sistema Terrestrial Layer System–Echelons Above Brigade (TLS-EAB), concebido para perturbar desde lejos las operaciones de cuarteles generales enemigos de alto nivel, superiores a la brigada, es decir divisiones y cuerpos.
Asimismo, debería interferir los circuitos de los misiles enemigos atacantes.
El sistema se considera una parte clave de la estrategia para identificar, monitorear y disparar a los oponentes desde distancias mayores y más seguras, algo necesario para luchar contra Ejércitos tecnológicamente avanzados como los de China y Rusia, indica C4ISRNET.
La compañía con sede en Maryland ya está trabajando en el hermano más pequeño y más enfocado a nivel táctico, conocido como TLS-BCT (Terrestrial Layer System-Brigade Combat Team), concebido para perturbar los circuitos enemigos a nivel de brigadas, y en un perturbador aerotransportado denominado 'Multi-Function Electronic Warfare-Air Large', o MFEW-AL.
El TLS original, el TLS-BCT, cabrá en un vehículo blindado Stryker 8×8 y acompañará a las brigadas de primera línea. El TLS-EAB irá en un par de camiones pesados, según un comunicado de la compañía.