Las masivas protestas por la muerte de un adolescente de 17 años a manos de un policía en Francia se volvieron más violentas este jueves en la ciudad de Marsella, donde los manifestantes vandalizaron la mayor biblioteca municipal al romper cristales y provocar varios incendios, informan medios locales.
Varios manifestantes rompieron las ventanas de la biblioteca del Alcázar, lanzaron bombas de humo a su vestíbulo y, según los videos publicados en las redes sociales, explotaron petardos adentro de la instalación municipal. Una fuente policial afirmó que, a pesar de los daños materiales, entre los que se cuentan los cristales rotos de la biblioteca, ningún libro resultó dañado como consecuencia de los disturbios.
Durante la noche del jueves al viernes, cerca de 500 edificios públicos y privados fueron incendiados por los manifestantes. A última hora de la mañana de esta jornada, 119 edificios públicos fueron atacados, incluidos 34 ayuntamientos, 28 escuelas y otros 57 inmuebles. Los alborotadores también atacaron 79 comisarías de la Policía y la Gendarmería.