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The Times: Jefes de las fuerzas especiales británicas borraron información de crímenes de guerra cometidos en Afganistán
Según nuevas evidencias, los militares cometieron hasta 80 homicidios de civiles no armados entre 2010 y 2013.
Comandantes del Servicio Aéreo Especial del Reino Unido (SAS, por sus siglas en inglés) supuestamente borraron los datos de los homicidios de civiles no armados cometidos por los militares británicos en Afganistán, reporta The Times este sábado.
Según una presentación legal de Leigh Day, firma que representa los intereses de Saifullah Yar, un afgano cuyos cuatro familiares al parecer fueron asesinados por integrantes del SAS, empleados de la sede de las fuerzas especiales "permanentemente borraban una cantidad desconocida de datos del servidor" justo antes de que los investigadores llegaran allí para inspeccionarlo. Además, se afirma que lo hicieron en "directo desafío" a la orden de preservar la información vinculada a acciones del SAS en Afganistán.
La presentación añade que el cierre de la operación Northmoor, en el marco de la cual la Real Policía militar investigaba los asesinatos y que fue cerrada en 2017 tras tres años sin llegar a ningún juicio, fue parte de un encubrimiento "amplio y multicapa" de asesinatos de civiles afganos por parte de militares británicos.
De acuerdo con nuevas evidencias, los integrantes de las tres unidades del SAS cometieron hasta 80 homicidios de civiles no armados entre 2010 y 2013, mientras que uno de los militares asesinó a 35 personas en un solo recorrido. Las audiencias preliminares al respecto tendrán lugar la próxima semana.
Asimismo, el Ministerio de Defensa del Reino Unido presentó una solicitud para permitir a los testigos dar sus testimonios a puerta cerrada, así como mantenerlos en secreto. El portavoz del organismo se negó a comentar la situación.
El diciembre pasado, el Ministerio de Defensa inició una investigación independiente de las supuestas actividades ilegales por parte de soldados británicos en Afganistán desde mediados de 2010 hasta mediados de 2013. Fue abierta después de que la BBC revelara que una unidad del SAS había asesinado a decenas de civiles en circunstancias sospechosas durante su operación militar de 6 meses en Afganistán hace más de una década.
De acuerdo con documentos y fuentes anónimas citadas por la cadena, un escuadrón del SAS podría haber matado a 54 personas desarmadas en la provincia de Helmand en 2010 y 2011, en el marco de las misiones denominadas "mata o captura". La función principal de estas operaciones era detener a comandantes talibanes. La BBC también informó que los militares colocaban fusiles AK-47 en el lugar de los hechos para justificar el asesinato de hombres desarmados.
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