La Oficina Federal de Cultura de Suiza (BAK, por sus siglas en alemán) devolvió este lunes a la Embajada de Egipto en Berna el fragmento de una estatua del faraón Ramsés II de 3.400 años de antigüedad.
Según un comunicado de la BAK, se trata de un "importante bien cultural arqueológico" que pertenece a un grupo de estatuas en las que el faraón que gobernó entre 1279 a. C. y 1210 a. C. está sentado junto a varias deidades del antiguo Egipto.
Asimismo, indica que la pieza de piedra en cuestión había sido robada del templo de Ramsés II en la ciudad egipcia de Abidos entre finales de 1980 y principios de 1990, detallando que aparentemente luego pasó por varias ubicaciones en el extranjero antes de que finalmente se introdujera en el país transalpino.
Fue confiscado
Dado que la importación, exportación y venta de bienes culturales hurtados o saqueados viola la ley federal, el objeto fue confiscado de manera definitiva como parte de un proceso penal en Ginebra.
Desde la BAK recuerdan que tanto Suiza como Egipto son firmantes de la Convención de la Unesco de 1970 sobre medidas para prohibir y prevenir la importación, exportación y transferencia ilegales de propiedad de bienes culturales.
"Esta restitución subraya el compromiso conjunto de Suiza y Egipto en la lucha contra la transferencia ilegal de bienes culturales, que se fortaleció aún más en 2011 con la entrada en vigor de un acuerdo bilateral sobre la importación y repatriación de bienes culturales", destacan.
Por último, comentan que Egipto se ha visto gravemente afectado por el expolio y la destrucción de sitios arqueológicos, precisando que los artículos de todas las épocas históricas de ese país son muy populares, especialmente los que pertenecen a los períodos faraónico, nubio y grecorromano.