Kiev debe dar pasos concretos para reconocer la responsabilidad de los nacionalistas ucranianos en la masacre de Volinia durante la Segunda Guerra Mundial, afirmó un legislador polaco.
El próximo martes, Polonia conmemora a las víctimas de las atrocidades calificadas por Varsovia como genocidio.
Szymon Szynkowski vel Sek, secretario de Estado de política europea de Polonia, declaró el jueves que "ciertamente se necesitan gestos en este asunto" por parte del Gobierno ucraniano, porque la tragedia "sigue siendo una herida sin cicatrizar".
"Este es un aniversario redondo de estos trágicos eventos, ciertamente les damos gran importancia y durante meses también hemos estado en contacto con la parte ucraniana sobre estas conmemoraciones y eso es todo lo que puedo decir en este momento", dijo a la emisora RMF.
El mes pasado, el vicecanciller polaco Pawel Jablonski declaró al mismo medio que no puede "imaginar que Ucrania no resuelva este problema antes de unirse a la Unión Europea".
Señaló que Varsovia apoya a Kiev en el conflicto contra Moscú, pero debe abordar el problema "de forma global, a largo plazo". "La idea es realizar exhumaciones, honrar a las víctimas", explicó.
- En 2016, el Parlamento de Polonia reconoció como genocidio la masacre de decenas de miles de polacos en el verano de 1943 en Volinia, una región del oriente europeo históricamente disputada por diversas potencias e imperios. En aquel período los nacionalistas ucranianos atacaron decenas de poblaciones polacas, causando alrededor de 100.000 muertes, principalmente de mujeres, niños y ancianos.
- La culpa de la masacre suele recaer sobre el Ejército Insurgente Ucraniano y la Organización de Nacionalistas Ucranianos, conocidos por su colaboración con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Al mismo tiempo, en el 2015, las autoridades ucranianas, que llegaron al poder como resultado del golpe de Estado en 2014, proclamaron a estas organizaciones "luchadores por la independencia" de Ucrania.