El intento de asesinato de la directora del grupo RT, Margarita Simonián, y de la periodista rusa Ksenia Sobchak "demuestra una vez más el carácter terrorista del régimen de Kiev, patrocinado por curadores occidentales", declaró este sábado la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova.
Al comentar el suceso, la vocera subrayó que se trata de "un nuevo intento de atentado terrorista contra civiles rusos organizado" por Kiev y que el motivo del fallido intento de asesinato fue las actividades profesionales de las víctimas.
"Todo esto demuestra una vez más el carácter terrorista del régimen de [presidente ucraniano Vladímir] Zelenski, responsable de toda una serie de atentados terroristas", recalcó, en referencia a los ataques contra varias figuras públicas rusas.
Zajárova señaló que Simonián recibe amenazas regularmente y no es la primera vez que se evita un intento de asesinato en su contra orquestado por los servicios de seguridad ucranianos.
"Es poco probable que esperemos una reacción de las organizaciones internacionales competentes. La hipocresía patológica es desde hace tiempo una tradición política del liberalismo occidental", concluyó.
Reacción de la directora del grupo RT
Por su parte, la propia Simonián comentó el frustrado atentado afirmando que "la traición es peor que la muerte".
"Lo que quiero decir es que hay cosas peores que la muerte. La vergüenza es peor que la muerte, la traición es peor que la muerte. Vivir con la sensación de que has hecho algo insalvable es peor que la muerte", declaró.
Frustrado atentado
Este sábado, se comunicó que las fuerzas de seguridad rusas frustraron un plan de los servicios especiales de Ucrania para matar a Simonián y Sobchak. De acuerdo con un comunicado del Servicio Federal de Seguridad ruso, se detuvo a varios miembros de un grupo neonazi llamado Paragraf-88 que obtuvieron información sobre las direcciones de trabajo y residencia de ambas periodistas.
Las personas detenidas señalaron que debían recibir 1,5 millones de rublos (unos 16.600 dólares estadounidenses) por cada asesinato.
A los individuos se les incautaron un fusil Kaláshnikov con 90 municiones, cuchillos, puños de acero, porras de goma y esposas, así como banderas con símbolos nazis y literatura nazi. También tenían medios de comunicación y computadoras con la información que "confirmó sus intenciones criminales".
Tras el inicio del conflicto entre Kiev y Moscú, se registraron varios atentados en territorio ruso, como la explosión en el puente de Crimea en octubre del 2022, los ataques contra objetivos no militares en las provincias rusas fronterizas con Ucrania, así como los atentados perpetrados contra destacadas figuras públicas rusas, entre ellos los asesinatos del corresponsal de guerra Vladlén Tatarski, la periodista Daria Dúguina y el famoso escritor Zajar Prilépin.