En redes sociales están circulando imágenes que muestran el esqueleto de una extraña criatura parecido a una "sirena" que fue encontrado en Australia, dejando desconcertados a los internautas.
De acuerdo con medios locales, los restos fueron hallados a principios de este mes por una mujer identificada como Bobbi-Lee Oates mientras caminaba por una playa de la localidad de Keppel Sands en el estado de Queensland.
Oates explicó su confusión al no poder establecer si el cadáver en descomposición correspondía a un humano o una especie desconocida. En las fotografías se aprecia una estructura ósea alargada con una médula espinal y una caja torácica, así como un cráneo con aspecto humanoide con una mandíbula alargada.
"Tenía exactamente la forma de una sirena, pero peluda, porque parecía tener una cola o una extremidad de algún tipo", señaló Oates, asegurando que le sorprendió mucho la apariencia humana del esqueleto.
A la búsqueda de la identidad de los restos
La mujer acudió a los usuarios de las redes sociales para que la ayudaran a identificar a la misteriosa criatura. Algunos destacaron inmediatamente sus características humanas, mientras que otros sugirieron que se trataba de una ballena o un delfín tras comparar la forma de su cráneo con los que se encuentran en los museos.
Por su parte, Rob Deaville, gerente de proyecto del Programa de Investigaciones de Varamientos de Cetáceos en la Sociedad Zoológica de Londres, comentó que los restos se parecían a los de "un pequeño cetáceo". No obstante, reiteró que no estaba "familiarizado con el área ni con las especies que normalmente se encuentran" en la región donde se descubrió el cadáver, por lo que no podía estar seguro de su suposición.
A pesar de los numerosos comentarios que recibió Oates acerca de su descubrimiento, esta declaró que la identidad de los restos aún es un misterio. "Esperaba que alguien comentara diciendo de qué se trataba, pero los comentarios fueron muy diferentes", indicó Oates, recalcando que ninguno de estos la convenció. "Simplemente no me parecía nada realista", concluyó.
Un portavoz de la Policía de Queensland confirmó que no había ninguna solicitud para investigar a los restos de la singular criatura, aunque Oates aseveró que lo había hecho.