Ucrania tilda de "inamistoso y populista" el bloqueo de su grano por parte de Polonia
La iniciativa de Polonia de mantener vedadas las importaciones de cereales desde Ucrania ha generado críticas por parte del Gabinete ucraniano, cuyo primer ministro, Denís Shmygal, tachó la propuesta de "inamistosa", en una publicación en su cuenta de Twitter.
Así, en su mensaje, por un lado, acusó a Rusia de desbaratar el acuerdo de granos del mar Negro y provocar una crisis alimentaria mundial, mientras que, por otro lado, escribió: "en este momento crítico, Polonia pretende seguir bloqueando la exportación de grano ucraniano a la UE".
"Se trata de una medida inamistosa y populista que afectará gravemente a la seguridad alimentaria mundial y a la economía de Ucrania", argumentó el primer ministro.
Shmygal llamó a los socios y la Comisión Europea a "garantizar la exportación sin trabas de todos los productos agrícolas ucranianos a la UE", lo que sería "un acto de solidaridad no solo con Ucrania, sino con el mundo", que -sostuvo- depende de los cereales ucranianos.
Poco antes, la vice primera ministra ucraniana para la Integración Europea y Euroatlántica, Olga Stafanishina, lanzó críticas similares contra las autoridades polacas, señalando al país comunitario que "democracia es cuando el Gobierno actúa como Poder Ejecutivo, no como sede de campaña".
La alta funcionaria además instó a que se adopte un "mecanismo de compensación para los agricultores ucranianos, que siguen trabajando en los campos a pesar del riesgo que corren sus vidas".
El 17 de julio, Rusia anunció la suspensión del acuerdo de transporte de granos de los puertos del mar Negro citando el incumplimiento de las obligaciones estipuladas en el documento y la discordancia de la iniciativa con los fines planteados. Dos días más tarde, el Ministerio de Defensa ruso advirtió que los buques que naveguen por el mar Negro con rumbo a los puertos ucranianos se considerarán potenciales portadores de carga militar para el país en conflicto con Rusia.
El cierre del corredor marítimo ha dado pie a discusiones en la UE sobre la necesidad de aumentar las importaciones de grano ucraniano por tierra, que ha causado descontento en cinco países comunitarios, incluida Polonia, cuyos mercados hace meses quedaron desequilibrados por la afluencia de cereales ucranianos.
El martes, el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, declaró que Varsovia "no se verá obligada a abrir el mercado en detrimento de los intereses del agricultor polaco".
Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumanía y Eslovaquia han firmado una declaración en la que piden a la Comisión Europea que amplíe la prohibición de importar grano ucraniano preservando solo el tránsito, anunció el miércoles el jefe del Ministerio de Agricultura polaco, Robert Telus, informaron medios locales.
- En abril, estos cinco países europeos prohibieron unilateralmente las importaciones de cereales y otros productos agrícolas ucranianos, ya que los envíos desestabilizaron sus mercados nacionales, amenazando el bienestar de los agricultores locales y provocando descontento público, que desembocó en protestas.
- Sin embargo, posteriormente levantaron esas medidas a cambio de que la Comisión Europea tomara la decisión de imponer hasta el 15 de septiembre un embargo a cuatro productos alimenticios procedentes de Ucrania: trigo, maíz, colza y semillas de girasol.