Occidente sabía que Kiev no tenía armas suficientes para su contraofensiva, pero esperaba que el "coraje e ingenio" de los ucranianos compensara este déficit, informó The Wall Street Journal este domingo.
Según el medio estadounidense, "los oficiales militares occidentales sabían que Kiev no tenía todo el entrenamiento y las armas, desde proyectiles hasta aviones de combate, que necesitaba para expulsar a las tropas rusas. Pero esperaban que el coraje y el ingenio de los ucranianos prevalecieran". Sin embargo, el autor del artículo indica que "esto no sucedió".
La contraofensiva corre el riesgo de llegar a un punto muerto, lo que le costará a Ucrania vidas y equipos sin un avance significativo, señala el periódico.
Al mismo tiempo, afirma que para Washington y sus aliados, existe una "perspectiva preocupante" de un conflicto más largo que requerirá nuevas y enormes inyecciones de armas modernas, ya que la probabilidad de cualquier avance a gran escala de los ucranianos este año está disminuyendo.
En este sentido, WSJ añade que la Casa Blanca se muestra cautelosa con respecto a la cantidad de apoyo que se puede ofrecer a Kiev por su preocupación ante los resultados de las elecciones de 2024. También es poco probable que los líderes europeos aumenten significativamente el apoyo a Kiev si sienten la renuencia de Estados Unidos. Además, la UE carece de recursos suficientes para proporcionar a Ucrania todo lo necesario.
Así, el diario escribe que la falta de éxito en la contraofensiva dio lugar a tensiones entre el presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, y funcionarios estadounidenses en la reciente Cumbre de la OTAN en Lituania.
Superioridad de la aviación rusa
Sin embargo, de acuerdo con el reporte, Ucrania esperaba encontrar brechas en las fortificaciones rusas, pero en cambio "campos de minas inesperadamente densos ralentizaron el ataque inicial de las fuerzas de Kiev […] dejándolas desprotegidas de los ataques de la aviación rusa".
Por otra parte, destaca que los vehículos aéreos no tripulados rusos y los helicópteros de ataque, en particular los Kamov Ka-52 Alligator, "resultaron ser especialmente peligrosos".
Los misiles Vijr, a su vez, tienen un alcance de aproximadamente ocho kilómetros, "que es más del doble del alcance de cualquier misil antiaéreo portátil disponible en Ucrania".
"Estados Unidos nunca intentaría derrotar a una defensa preparada sin superioridad aérea, pero ellos [los ucranianos] no tienen superioridad aérea", explicó John Nagl, un teniente coronel retirado del Ejército estadounidense.
Una evaluación clasificada del Pentágono de febrero, supuestamente filtrada por el aviador de la Guardia Nacional Aérea Jack Teixeira, también citó el riesgo de "incapacidad para prevenir la superioridad aérea rusa".
"No hay una bala de plata en la guerra"
En general, el WSJ señala que Ucrania tiene solo una pequeña fuerza aérea compuesta por aviones y helicópteros de fabricación soviética, por lo que Zelenski insiste en la necesidad de suministrar los F-16 de fabricación estadounidense a su país.
No obstante, el líder estadounidense, Joe Biden, aún no ha dado la autorización necesaria para enviar este tipo de cazas a Ucrania, mientras que la creación de cadenas de suministro llevaría meses.
Asimismo, el medio indica que incluso si Ucrania recibe aviones, no hay una garantía inequívoca de que influyan en el curso del conflicto. "No hay una bala de plata en la guerra", dijo en abril el presidente del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, Mark Milley. "Los resultados de las batallas y las guerras son en función de muchas, muchas variables", agregó.
- La contraofensiva ucraniana en las direcciones del sur de Donetsk, Artiómovsk y Zaporozhie comenzó el 4 de junio.
- El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró este viernes que ni los fondos multimillonarios de la OTAN ayudan a Zelenski a avanzar en el campo de batalla y está claro "los proveedores occidentales del régimen de Kiev están decepcionados con los resultados de la llamada contraofensiva ucraniana".