Arqueólogos italianos descubrieron durante unas excavaciones cerca del Vaticano las ruinas del teatro de Nerón.
El teatro del tristemente famoso emperador romano es mencionado en reiteradas ocasiones en las crónicas históricas de autores como Suetonio y Tácito, que relatan que el edificio fue construido solo para que el tirano, conocido por su extravagancia, ensayara allí sus recitales poéticos.
Sin embargo, hasta hace poco los escritos históricos no habían sido confirmados por pruebas más tangibles.
Las ruinas fueron descubiertas en el jardín del Palazzo della Rovere, que desde 2020 es objeto de excavaciones como parte de la reconstrucción planificada del monumento arquitectónico, informó el 26 de julio Corriere della Sera. El palacio es la sede de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén, y en la actualidad está parcialmente alquilado a un hotel de lujo.
Descrito como de "importancia excepcional" por la superintendente de Roma, Daniela Porro, el hallazgo tuvo lugar a una profundidad media de cinco metros sobre el nivel actual de la calle, a pocos metros de la basílica de San Pedro, en una zona que ha sufrido transformaciones radicales a lo largo de los siglos.
El descubrimiento, en realidad los descubrimientos, abarcan un amplio arco cronológico, desde la época republicana de Roma hasta el siglo XV, y van desde las estructuras del 'Theatrum Neronis' del último emperador de la dinastía Julio-Claudia hasta algunos testimonios de peregrinaciones medievales a la zona donde fue enterrado el apóstol Pedro.
La excavación sacó a la luz tanto estructuras como decoraciones y objetos. En particular, se descubrieron suntuosas columnas con finos acabados en mármoles preciosos, decoraciones de yeso con baño de oro y áreas de servicio, posiblemente almacenes para vestuario.
Todos los elementos, junto con la alta técnica de construcción y los sellos marcados en los ladrillos, hacen pensar que las ruinas pertenecen al teatro de Nerón, que según Plinio el Viejo, antiguo autor y filósofo romano, estaba realmente allí, cerca del río Tíber.
Además de los restos del edificio, también se encontraron cerámicas raras y siete copas de vidrio de colores del siglo X. Los arqueólogos destacan que hasta ahora solo se habían encontrado otras siete copas de vidrio de esa época, informa The Associated Press.