Peaches Stergo, de 36 años y residente en Florida, fue condenada este jueves a más de 4 años de prisión por estafar durante años a un sobreviviente del Holocausto, dejándole sin los ahorros de toda su vida, según comunicó la Fiscalía.
La mujer conoció al anciano en un sitio web de citas y luego, en el 2017, le pidió que le prestara dinero ya que, según sus palabras, había ganado una gran indemnización en un juicio por lesiones, pero no podía recibir los fondos hasta que pagara a su abogado. Después de que el hombre le diera el dinero, Stergo le dijo que los fondos se habían depositado en su cuenta de un banco. Sin embargo, todo resultó ser mentira.
A continuación, en repetidas ocasiones, le pidió a la víctima que depositara dinero en sus cuentas bancarias, afirmando que, si no lo hacía, sus cuentas serían congeladas, y nunca podría pagarle. Así, a lo largo de más de 4 años, recibió 62 cheques que sumaban más de 2,8 millones de dólares. La víctima se vio incluso obligada a abandonar su apartamento.
Durante el proceso judicial, los fiscales revelaron que Stergo hizo todo lo posible para manipular al anciano, incluida la creación de correos electrónicos falsos del banco. "La víctima, que tenía más de 80 años cuando conoció a la acusada, sufre deterioro cognitivo, entre otros problemas de salud. Al recurrir a un sitio web de citas, la víctima buscaba algo fundamental: compañerismo y amor. Y la acusada se aprovechó de su vulnerabilidad", escribieron los fiscales federales en la propuesta de sentencia.
Además, la acusada, que llamaba a la estafa su "negocio", se burló del anciano en privado ante su "verdadera pareja", John Paul Miller, cuando él le confesó que la amaba. Cuando el hombre se quedó sin dinero, Strego le escribió a Miller que él ya "no tiene nada más que empeñar". "Me siento agraviada y frustrada por no haber ganado dinero [...] No quiero trabajar, es demasiado difícil", dijo.
"Peaches Stergo estafó cruelmente a un superviviente del Holocausto, de 87 años, que simplemente buscaba compañía. Utilizó los millones de dólares del fraude para vivir una vida de lujo a costa de la víctima", dijo el fiscal Damian Williams, refiriéndose al hecho de que la acusada utilizó el dinero del fraude para comprar una casa, un barco, numerosos coches, joyas, ropa de diseño, entre otras cosas.
Finalmente, Strego fue condenada a 51 meses de prisión, 3 años de libertad condicional y a pagar una indemnización de más de 2,8 millones de dólares, de la que forma parte la casa y más de 100 artículos de lujo que adquirió como resultado del fraude.